lunes, julio 23, 2012

El autor de la masacre de Denver, ante la Justicia

James Holmes, de 24 años, se presentó ante el tribunal con el pelo teñido de naranja y rojo. Con la mirada al suelo, escucha la acusación por asesinato premeditado.

James Holmes, el autor de la masacre de Denver, en la que murieron 12 personas y más de 50 resultaron heridas, declarará hoy por primera vez ante la Justicia. Las autoridades, no obstante, no tienen grandes expectativas: afirman que se niega a cooperar y que podrían pasar meses para saber cuáles fueron los motivos que lo llevaron a cometer el sanguinario ataque durante el estreno de la última película de Batman.

Holmes fue apresado en el estacionamiento del cine tras la masacre y esta mañana se encontraba detenido en una celda contigua a la corte de Arapahoe, desde donde a las 9.30 (12.30 de Argentina) fue trasladado ante el tribunal. Con la mirada hacia abajo, barba incipiente y el pelo teñido de naranja fluorescente y rojo, escuchó la formalización de su acusación por asesinato premeditado.


Al joven de 24 años lo representa un defensor público. El jefe de la Policía de Aurora, Daniel Oates, dijo que el acusado “guardó silencio legal” desde que fue detenido en los primeros minutos del viernes, poco después del ataque a tiros en un cine de esa ciudad, que dejó 12 muertos y 58 heridos, algunos de gravedad. “No nos habla'', agregó Oates.

Holmes está detenido sin derecho a fianza en un complejo penitenciario de la ciudad de Centennial, en Colorado, a unos 21 kilómetros del cine de Aurora. También se le podrían imputar los cargos de agresión agravada y violación a la ley de armas.

Ayer, las autoridades del recinto médico Anschutz de la Universidad de Colorado averiguaron si Holmes había utilizado su posición en un programa educativo para conseguir materiales peligrosos, pero los sólo se limitaron a decir que el joven era un estudiante muy dedicado.

La Policía, por su parte, confirmó que Holmes había comenzado a comprar armas en locales de la zona de Denver dos meses antes de la tragedia. En su casa, la policía encontró un arsenal de explosivos.