domingo, abril 14, 2013

¿Kim Jong-un repliega su tono? El líder norcoreano lleva dos semanas sin aparecer

El líder norcoreano, Kim Jong-un, lleva ya dos semanas sin aparecer en público, lo que hace pensar a analistas de Corea del Sur que el mandatario podría estar sopesando una moderación de su retórica belicista, informa la agencia Yonhap.

Kim Jong-un no se deja ver en público desde el 1 de abril, cuando presidió la sesión parlamentaria anual de primavera. Su alejamiento de los focos no era inusual en el pasado, pero no en las actuales circunstancias, cuando se espera un posible lanzamiento de misil balístico por parte de Pyongyang, destaca la agencia.

Un funcionario de la autoridad de inteligencia de Seúl ha negado los rumores sobre un supuesto golpe de Estado contra Kim, asegurando que no se ha detectado ningún movimiento inusual en torno al líder de Corea del Norte. Por su parte, una fuente familiarizada con los asuntos de Pyongyang considera que la ausencia de Kim es parte de "la guerra psicológica que podría llamar la atención de Corea del Sur y EE.UU.".

Se espera que el líder norcoreano aparezca en público el lunes 15 de abril, cuando el país celebra el 101 aniversario del nacimiento de Kim Il-sung, fundador del país y abuelo del actual líder Kim Jong-un. Conocido como 'Día del Sol', se trata de la fiesta nacional más importante de Corea del Norte. Todo el mundo aguarda con tensión esta festividad, ya que, a tenor de algunos expertos internacionales y altos funcionarios estadounidenses, este podría ser el día elegido por Pyongyang para lanzar un misil.

Pyongyang ha advertido a Corea del Sur que se enfrentará a consecuencias catastróficas si las autoridades permiten a sus organizaciones no gubernamentales (ONG) enviar folletos de propaganda con globos lanzados hacia el norte de la península durante la fiesta nacional del 'Día del Sol'. “Tal acción sólo despertará mucha preocupación y la furia de nuestro ejército y de nuestro pueblo”, reza un comunicado publicado en el sitio web del gobierno norcoreano Uriminzokkiri. La policía surcoreana no permitió a los activistas de las ONGs llevar a cabo la acción este sábado.