El mundo de las golosinas posee una gran variedad de 
productos destinados a captar la atención de los más pequeños. Desde 
hace muchos años, gominolas, caramelos chicles o chupa-chups de toda 
clase de colores, texturas y sabores compiten en las tiendas por acabar 
en la boca de niños y mayores.
Sin embargo, si pensabas que ya lo habías visto todo en el mundo de las «chuches», es que probablemente no conoces la lista que han elaborado en «El Blog de las golosinas» con los diez caramelos reales más asquerosos, repulsivos o escatológicos del planeta.
1.-Gusanos de chocolate blanco
El fabricante de las latas de lombrices White Chocolate 
Maggots asegura que su producto, además de no contener gusanos de 
verdad, es mucho más sabroso que los que imita. De momento, los paquetes
 no indican si ha probado ambos para sostener esa afirmación.
2.-Hose Nose
Este dispensador de caramelo líquido de color verde con 
forma de nariz proporciona una experiencia de muy dudoso gusto. Basta 
con colocar el Hose Nose sobre la propia nariz y atrapar con la lengua 
los mocos de caramelo que, poco a poco, gotean desde la nariz.
3.-Inodoro de sal de frutas
Un pequeño inodoro de plástico relleno con sal de frutas y 
un chupa-chups con forma de desatascador son los elementos que conforman
 el Sour Flush Candy, una golosina tan entretenida como escatológica.
4.-Las judías de Todos los Sabores de Bertie Botts
Directamente sacadas de los libros de Harry Potter, estas 
grajeas con forma de legumbre fueron creadas por el mago Bertie Botts 
con el objetivo de reunir en ellas los mejores sabores del mundo. Sin 
embargo, un error en su fórmula motivó que algunas de ellas sepan a 
pimienta negra, lombrices, cera de oído, huevo podrido, vómito o 
cualquier otro sabor asqueroso. En la vida real, en cambio, estos 
caramelos suelen tener gustos a distintas frutas, aunque algunos poseen 
sabores muy ácidos, picantes e, incluso, a plástico.
5.-Piruletas con bicho
Quienes posean un estómago a prueba de bombas pueden 
atreverse a probar estos caramelos en los que el tradicional chicle de 
su interior se ha sustituido por un auténtico insecto. Grillos, gusanos,
 escorpiones u hormigas criados en granjas que cumplen con los más 
estrictos controles sanitarios son el principal atractivo de estas 
peculiares golosinas con palo.
Los caramelos de pata de pollo, globos oculares de oveja y corazón de vaca, inspirados en el programa «Fear Factor», los pañales con caca de bebé hecha de chocolate, las cucarachas rellenas de Harry Potter, la gelatina que imita la cera de los oídos y la tirita que contiene una costra de caramelo de fresa completan esta «apetitosa» lista

