El premio nobel de economía 2010, Christopher Pissarides, pasó de ser el activista más entusiasta de la divisa europea a un detractor de la misma en un lustro. Ahora propone reformarla por completo o "desmantelar el proyecto del euro".
"Si no hacemos las reformas, otra opción es abandonarlo", dijo el nobel chipriota-británico en referencia al euro en un discurso inaugural como catedrático de la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres.
Hace años, en especial en 2008, Pissarides aplicó muchos esfuerzos personales para persuadir a las autoridades de Chipre (el país insular del Mediterráneo del que es originario) que ingresaran en la zona euro. Ahora admite que en aquel entonces estaba completamente convencido de que el proyecto sería todo un éxito.
"Hace poco la idea de una divisa única en Europa parecía muy atractiva y caí en la tentación", se expresó el catedrático. "No creíamos que la congelación de los tipos de cambio hiciera daño al sur, pero, sin duda alguna, todo salió mal", cita el periódico 'CyprusMail'.
La convicción de que una misma talla podría servir para todos no era factible, explicó Pissarides. Con el tiempo este proyecto llevó a unos resultados completamente diferentes a los previstos. El euro contiene el crecimiento de la economía, la creación de nuevos puestos de trabajo y produce una división todavía más fuerte entre los países de Europa en lugar de unirlos.
"No conseguiremos nada tratando de resolver los problemas de deuda, primero bajando los gastos y luego aumentándolos de nuevo –pronosticó el economista–. Las medidas para mantener la estabilidad del euro y la eurozona, tal como están planteadas actualmente, dañan la economía de Europa".
Entre todos los problemas existentes, Pissarides destacó la aparición de una generación perdida de jóvenes en muchos países europeos: aquellos que, a pesar de poseer una buena formación, no encuentran trabajo y tienen escasas perspectivas en el futuro. "Esto no es en absoluto lo que queríamos conseguir cuando fundamos el euro", afirmó.
"Según mi parecer –adelantó–, es necesario desmantelar el proyecto del euro o reformarlo por completo así que se acentúe la estimulación del crecimiento y la creación de empleos nuevos. El actual statu quo no llevará a nada bueno", resumió el experto.
Hace años, en especial en 2008, Pissarides aplicó muchos esfuerzos personales para persuadir a las autoridades de Chipre (el país insular del Mediterráneo del que es originario) que ingresaran en la zona euro. Ahora admite que en aquel entonces estaba completamente convencido de que el proyecto sería todo un éxito.
"Hace poco la idea de una divisa única en Europa parecía muy atractiva y caí en la tentación", se expresó el catedrático. "No creíamos que la congelación de los tipos de cambio hiciera daño al sur, pero, sin duda alguna, todo salió mal", cita el periódico 'CyprusMail'.
La convicción de que una misma talla podría servir para todos no era factible, explicó Pissarides. Con el tiempo este proyecto llevó a unos resultados completamente diferentes a los previstos. El euro contiene el crecimiento de la economía, la creación de nuevos puestos de trabajo y produce una división todavía más fuerte entre los países de Europa en lugar de unirlos.
"No conseguiremos nada tratando de resolver los problemas de deuda, primero bajando los gastos y luego aumentándolos de nuevo –pronosticó el economista–. Las medidas para mantener la estabilidad del euro y la eurozona, tal como están planteadas actualmente, dañan la economía de Europa".
Entre todos los problemas existentes, Pissarides destacó la aparición de una generación perdida de jóvenes en muchos países europeos: aquellos que, a pesar de poseer una buena formación, no encuentran trabajo y tienen escasas perspectivas en el futuro. "Esto no es en absoluto lo que queríamos conseguir cuando fundamos el euro", afirmó.
"Según mi parecer –adelantó–, es necesario desmantelar el proyecto del euro o reformarlo por completo así que se acentúe la estimulación del crecimiento y la creación de empleos nuevos. El actual statu quo no llevará a nada bueno", resumió el experto.