El avión en el que ayer viajaba el recién estrenado presidente de Francia, François Hollande, se vio obligado a darse la vuelta tras recibir el impacto de un rayo en
pleno viaje París-Berlín. El líder tuvo que regresar a la capital gala,
montar en un nuevo aparato e iniciar de nuevo el viaje para
entrevistarse con la canciller alemana, Angela Merkel. Lo que le ocurrió
ayer a Hollande nos hace cuestionarnos seriamente qué nos ocurriría a
nosotros si nos viéramos en una situación similar. ¿Estamos seguros
dentro de un avión? ¿Tendríamos que, como Hollande, darnos la vuelta? ¿Y
si viajamos en coche? ¿Y en barco?
El meteorólogo Emilio Rey desveló hace tiempo en su blog «Capturando la temperie»
para ABC, algunos detalles imprescindibles que deberías saber sobre
este fenómeno meteorológico, así como qué hacer si, cuando sucede, te
encuentras de viaje.
Lo
primero que deberás saber es que el alcance de un rayo puede ser
mortal. Su impacto es tan brutal que la descarga eléctrica podría dar
lugar a graves quemaduras externas e internas, así como a arritmias,
graves problemas cardíacos o a la pérdida de algún miembro. Es por ello
por lo que la única forma de protegernos de estos impactos, a menudo
letales, no es otra que la la prevención, así como saber en qué lugares estamos más seguros:
- No destaques:
Lo primero que el meteorólogo subraya es que «la descarga eléctrica
caerá en el sitio que menos resitencia oponga, así pues, tenemos que
ponérselo difícil, esto es, no destacar sobre otras superficies y hacer que no se fije en nosotros».
- El coche, el lugar más seguro:
Por extraño que resulte, es uno de los mejores sitios para guarecernos
de una posible descarga eléctrica. De hecho, Emilio Rey subraya que si nos encontramos en el campo en mitad de una tormenta, lo mejor será meternos rápidamente en nuestro vehículo y cerrar las ventanillas. Así lo explica: «Los coches cerrados son un seguro de vida, y no por el aislante de las ruedas, sino por el llamado efecto «jaula de Faraday»,
que hace que la electricidad se derrame por las superficies metálicas
exteriores y no afecte al interior». Así que, ya sabes, si tienes un
coche cerca, métete y espera allí a que pase la tormenta lo más tranquilo que puedas.
- Lugares prohibidos: Donde nunca deberías estar si hay peligro de tormenta es en la playa, la piscina o la montaña.
Respecto a los dos primeros, y puesto que el agua es conductora de la
electricidad, parece lógico que nos alejemos de ella si queremos evitar
una descarga. Como señala Emilio Rey, «los barcos son lugares especialmente peligrosos cuando
se desencadena una tormenta en el mar, pues ahí tenemos casi todas las
papeletas para que la descarga nos seleccione». Recuerda la regla de oro
de «no destacar sobre otras superficies». Si estamos en un barco en
pleno mar, es lógico que el rayo nos seleccione para el impacto. Sin embargo, no te alarmes en exceso: «Todas las embarcaciones van equipadas con sistemas pararrayos en los palos mayores».
Respecto a la montaña, el hecho de encontrarnos en un sitio especialmente elevado nos hace un objetivo especialmente apetecible para el rayo,
señala Emilio Rey. En estos casos, «sumamente peligrosos», el experto
apunta que deberemos informarnos perfectamente de las condiciones
meteorológicas que nos encontraremos antes de salir de ruta o de
escalada a la montaña.
Cuidado también en casa:
Lógicamente nuestra vivienda es el lugar más seguro, aunque deberás
tener cuidado con algunos detalles. «Cuando una tormenta se desencadena
encima nuestro y estamos bajo techo, la precaución principal es cerrar
las ventanas y cualquier elemento que provoque corrientes de aire. Los
rayos son muy amigos de esas corrientes, y muchas veces las siguen. Se han dado casos de rayos que entran por una ventana y salen por otra, y en esa fugaz visita que hacen por dentro de la casa es mejor que no nos encuentren delante. Nos atravesaría».