sábado, septiembre 22, 2012

Luces y sombras del iOS 6

Lo mejor y lo peor del nuevo sistema operativo de Apple.

El lanzamiento, como todos los de Apple, fue espectacular. Y de una sola tacada los de Cupertino destapaton, hace apenas una semana, la nueva versión de su iPhone, los nuevos modelos de los reproductores iPod y también el nuevo sistema operativo para gobernarlos a todos, el iOS 6. Anunciado como "el mejor sistema operativo móvil del mundo", iOS 6 incorpora asombrosas novedades, además de una integración real y completa con iCloud, la solución "en la nube" de Apple y que hace posible que accedamos a nuestros contenidos (los mismos), desde múltiples dispositivos.

Nuevas aplicaciones, como «Passbook», la posibilidad de hacer FaceTime (videoconferencia) por la red 3G y no solo por wifi, la integración total con Twitter y Facebook, la posibilidad de dictar textos, mensajes y correos electrónicos... La lista de mejoras es larga y cualquiera puede profundizar en ella con una simple búsqueda en internet.


Sin embargo, dos de las nuevas funciones merecen una atención especial. Una de ellas cambiará por completo (otra vez) la forma de relacionarnos con el móvil. La otra, sin embargo, nació prematura, con defectos y responde más a una guerra comercial que a las necesidades de los usuarios. Hablamos, por un lado, de Siri, el revolucionario sistema de reconocimiento de voz de Apple, que con iOS 6 ya funciona en español; y de Mapas, la aplicación que ha sustituído (y de momento sin posiblidad de vuenta atrás), al famoso y utilísimo Google Maps. Son las dos caras de una moneda que vale su peso en oro y con la que Apple se juega, ni más ni menos, que la indiscutible ventaja que hasta ahora ha mantenido con respecto a sus competidores. Son las luces y las sombras del nuevo iOS 6.

 

 

Siri, la luz


Si hubiera que calificar Siri (un asistente personal que entiende lo que le decimos) con una sola palabra, esa palabra sería "impresionante". Y es que Siri no tiene nada que ver con los sistemas de reconocimiento de voz que incorporan otros fabricantes, que se limitan a "entender" una reducida lista de comandos preestablecidos. No, Siri es otra cosa, y va mucho más allá. Se puede, literalmente, hablar con ella y decirle frases como «Dile a Juan que llego tarde», o «Recuérdame que llame a Paco mañana a las seis», o «¿Cómo quedó el Madrid?», o «¿en qué cae el 21 de noviembre?», o «ponme algo de AC DC», o «me apetece jugar al Tetris», o «tengo hambre, hay pizzerías por aquí?», o «¿crees que lloverá hoy?» o «despiértame mañana a las siete», o «llévame a casa de Pedro», o... cualquier otra cosa que se nos ocurra decir y que tenga que ver con la batería de aplicaciones que gobiernan nuestra vida personal, como Mensajes, Correo, Agenda, Calendario, Recordatorios, Navegación GPS, Música, Galería de imágenes, el Tiempo... Incluso podemos pedirle que publique un tweet o que escriba por nosotros un comentario en Facebook.

Siri supone una nueva forma de usar el iPhone (y también el iPad). Una forma mucho más humana, cómoda y directa que la de teclear encima de una pantalla, aunque sea multitáctil. Algo que está destinado a revolucionar, de nuevo, una industria que vive siempre en plena revolución. Y esto es sólo el principio. En efecto, nuevas bases de datos y temas de los que «hablar» con Siri se irán incorporando a partir de ahora a una velocidad vertiginosa, con unas posibilidades que abren un camino completamente nuevo en la telefonía móvil, tanto para los usuarios como para la posibilidad de generar nuevos negocios.

 

 

Mapas, la sombra


Y luego están los Mapas, la otra cara de la moneda. Nunca un producto de Apple había cosechado tantas críticas (y tan feroces) en tan poco tiempo. Muchos especialistas no han dudado en calificar la aplicación de «fiasco», incluso de «verguenza». Y es que iOS 6 ha supuesto el divorcio definitivo de Apple con Google, su gran rival en la red. Lo cual, para los usuarios, significa que cuando instalen el nuevo sistema operativo ya no podrán utilizar Google Maps, ni usar la aplicación nativa de YouTube, dos productos masivos (y exitosos) donde los haya.

Y si bien es cierto que los Mapas de Apple tienen un gran potencial (están integrados con Siri y permiten una vista aérea y en 3D) también lo es que están, por ahora, plagados de errores, tanto en sus datos como en su forma de presentarlos. Imágenes grotescamente deformadas, localizaciones erróneas, falta de información sobre servicios públicos, imprecisiones en la localización... En definitiva, un producto que tiene toda la pinta de haber sido lanzado con urgencia y antes de estar listo por completo. Apple pide paciencia a sus usuarios (lo mismo que hizo con el problema de las antenas en el iPhone 4), y asegura que en poco tiempo los fallos estarán subsanados. De hecho, dispone de un auténtico ejército de técnicos y especialistas trabajando sin descanso para hacerlo.

Lo cual no quita el hecho de que su decisión de eliminar Google Maps le ha hecho un flaco favor a los usuarios, que se han encontrado, de la noche a la mañana, con una aplicación de mapas que es sensiblemente inferior a la que había. Muchos se preguntan por qué los de la manzana no han esperado a que sus "mapas" estuvieran más maduros antes de lanzarlos. Y critican que los intereses puramente comerciales de la compañía hayan prevalecido sobre los de los consumidores, a los que Apple presume (más que nadie) de defender.

Las «sombras» de los Mapas están siendo tales que amenazan, incluso, con oscurecer las «luces» de Siri. Apple, incuestionablemente, ha cometido un error, y en un momento en que todos sus principales competidores aprietan más que nunca. Las próximas semanas serán decisivas para conocer el resultado real del lanzamiento del iOS 6. Y para saber si las luces han conseguido, o no, vencer a las sombras.