La islas Reunión y Mauricio, ambos destinos turísticos bien conocidos, esconden algo completamente inesperado. Científicos han encontrado el fragmento de un antiguo continente desprendido hace 60 millones de años mientras Madagascar y la India se separaban. Conocido como Mauritia,
 permanecía escondido debajo de enormes masas de lava. Estos 
micro-continentes en los océanos parecen ocurrir con más frecuencia de 
lo que se pensaba, según un estudio publicado en la última edición de la
 revista Nature Geoscience.
La ruptura de los continentes se asocia a menudo con 
columnas eruptivas. Burbujas gigantes de roca caliente que suben desde 
el manto profundo y ablandan las placas tectónicas hasta el punto de que
 estas no lo resisten más y se acaban fracturando. Así es como la parte 
oriental de Gondwana,
 un supercontinente surgido hace 600 millones de años, comenzó a 
fracturarse en el período jurásico y se separó hace unos 170 millones de
 años. Esto dio lugar a la formación de Madagascar, India, Australia y la Antártida, que luego migraron a su posición actual.
| Situación del microcontinente bajo las islas de Mauricio y Reunión | 
Una curiosidad geológica
Sin embargo, algunos pedazos de esas masas continentales pudieron haberse perdido durante la deriva, como las islas Seychelles, consideradas como una curiosidad geológica por los especialistas.
Un grupo de geólogos procedentes de Noruega, Sudáfrica, 
Gran Bretaña y Alemania han publicado una investigación que sugiere que,
 en base al estudio de los granos de arena de lava de la playa de
 Isla Mauricio, existen fragmentos adicionales. Los granos de arena 
contienen circones, cristales diminutos de silicato de circonio muy 
resistentes a la erosión, de edades comprendidas entre 660 y 1.970 
millones de años, que revelan la existencia del antiguo microcontinente.
 
Este método de datación se complementó con un nuevo cálculo
 de la tectónica de placas, que explica exactamente cómo y dónde los 
fragmentos terminaron en el Océano Índico. 
