Corea del Norte ha desplazado varios misiles balísticos por su costa oriental para confundir las labores de inteligencia de Corea del Sur y Estados Unidos ante un posible lanzamiento, informa la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
Según indica el análisis de inteligencia de Seúl y Washington, Corea del Norte ha desplazado dos misiles de alcance intermedio Musudan, que habían permanecido ocultos en un hangar en la ciudad portuaria oriental de Wonsan, dentro y fuera de la instalación. También fue observado en la provincia sureña de Hamgyeong el desplazamiento de cuatro o cinco vehículos con ruedas, que, se sospecha, son los denominados vehículos transportadores-erectores-lanzadores (TEL, por sus siglas en inglés).
"Hay señales de que el Norte podría disparar misiles Musudan en cualquier momento en breve", dijo una fuente de inteligencia bajo las condiciones del anonimato, al tiempo que precisó que Pyongyang “ha estado trasladando constantemente sus misiles dentro y fuera de un hangar, lo que precisa una estrecha vigilancia".
Otra fuente consideró que la última jugada del Norte está orientada a añadir "fatiga" extra a los oficiales surcoreanos y estadounidenses, con el objetivo frustrar sus esfuerzos para captar de inmediato el momento del lanzamiento de un misil.
Según anunció un funcionario de Defensa japonés, citando datos de los satélites de inteligencia, una de las lanzadoras de misiles norcoreanas en la costa oriental de Corea del Norte está ahora en posición de ataque.
Por su parte, Corea del Sur tachó las amenazas bélicas de Corea del Norte de táctica "inútil", dejando claro que Pyongyang habrá de atenerse a consecuencias si efectúa el lanzamiento de un misil.
"Hay señales de que el Norte podría disparar misiles Musudan en cualquier momento en breve", dijo una fuente de inteligencia bajo las condiciones del anonimato, al tiempo que precisó que Pyongyang “ha estado trasladando constantemente sus misiles dentro y fuera de un hangar, lo que precisa una estrecha vigilancia".
Otra fuente consideró que la última jugada del Norte está orientada a añadir "fatiga" extra a los oficiales surcoreanos y estadounidenses, con el objetivo frustrar sus esfuerzos para captar de inmediato el momento del lanzamiento de un misil.
Según anunció un funcionario de Defensa japonés, citando datos de los satélites de inteligencia, una de las lanzadoras de misiles norcoreanas en la costa oriental de Corea del Norte está ahora en posición de ataque.
Por su parte, Corea del Sur tachó las amenazas bélicas de Corea del Norte de táctica "inútil", dejando claro que Pyongyang habrá de atenerse a consecuencias si efectúa el lanzamiento de un misil.
RT