Un grupo de investigadores ha descubierto una estructura gigante de piedra bajo las aguas del Mar de Galilea, en Israel. Los arqueólogos están desconcertados porque no saben con qué propósito la construyeron ni la época de su edificación.
Según los investigadores, la misteriosa estructura tiene forma cónica y está compuesta de piedras de basalto de hasta un metro de largo sin labrar. Tiene una altura de casi 10 metros y un diámetro de aproximadamente 70 metros.
La estructura, que pesa unas 60.000 toneladas, fue localizada durante un estudio en la zona. Equipos de buzos investigan actualmente el hallazgo, cuyos primeros datos han sido publicados en la revista ‘Journal of Nautical Archaeology’.
Según los científicos, la construcción se compone de un motón de rocas apiladas una encima de otras y recuerdan que estructuras de este tipo existen en otras partes del mundo y se utilizaban para demarcar los entierros. Lo que no saben los investigadores es si su hallazgo se utilizó para este fin.
Los arqueólogos sostienen que —a juzgar por lo que han visto— sus constructores pertenecían a una “compleja y bien organizada sociedad” con “habilidades en la planificación económica”. Además, aseguran que, probablemente, fue construida en tierra, sólo que más tarde quedó cubierta por el Mar de Galilea debido a que el nivel del agua subió.
Los científicos enumeran varios ejemplos de estructuras megalíticas que se encuentran también cerca del Mar de Galilea de más de 4.000 años de antigüedad, que es la antigüedad que creen que podría tener esta construcción. Un conjunto monumental ubicado a unos 30 kilómetros de este se compone de tres círculos de piedras, el más grande de 56 metros de diámetro.
De momento, las investigaciones siguen su curso con el fin de encontrar artefactos asociados y determinar cuándo fue edificada la estructura y el propósito de la misma.
La estructura, que pesa unas 60.000 toneladas, fue localizada durante un estudio en la zona. Equipos de buzos investigan actualmente el hallazgo, cuyos primeros datos han sido publicados en la revista ‘Journal of Nautical Archaeology’.
Según los científicos, la construcción se compone de un motón de rocas apiladas una encima de otras y recuerdan que estructuras de este tipo existen en otras partes del mundo y se utilizaban para demarcar los entierros. Lo que no saben los investigadores es si su hallazgo se utilizó para este fin.
Los arqueólogos sostienen que —a juzgar por lo que han visto— sus constructores pertenecían a una “compleja y bien organizada sociedad” con “habilidades en la planificación económica”. Además, aseguran que, probablemente, fue construida en tierra, sólo que más tarde quedó cubierta por el Mar de Galilea debido a que el nivel del agua subió.
Los científicos enumeran varios ejemplos de estructuras megalíticas que se encuentran también cerca del Mar de Galilea de más de 4.000 años de antigüedad, que es la antigüedad que creen que podría tener esta construcción. Un conjunto monumental ubicado a unos 30 kilómetros de este se compone de tres círculos de piedras, el más grande de 56 metros de diámetro.
De momento, las investigaciones siguen su curso con el fin de encontrar artefactos asociados y determinar cuándo fue edificada la estructura y el propósito de la misma.