viernes, junio 22, 2012

Ivory wave: La droga que desata el canibalismo

Pamela McCarthy de 35 años intentó asesinar a su hijo luego de consumir “Ivory wave”, la misma droga que utilizó el canibal de Miami.

Una mujer intentó asesinar a su hijo en Estados Unidos luego de consumir “Ivory wave”, la droga que utilizó Ruby Eugene, sorprendido en Miami cuando devoraba el rostro de un indigente.


Según el capitán de la Policía neoyorkina, Pamela McCarthy de 35 años, no era consciente de lo que estaba ocurriendo a su alrededor. Relató que los chillidos que salían de la casa conmovieron a los vecinos, que después de un rato llamaron a las autoridades. Pero ante la demora de los oficiales en acudir, Heather Ames, que vive en la casa contigua, se dirigió hacia donde se estaba produciendo la escena.

La madre no paraba de zurrar al niño. Entonces empezaron a forcejear, pero la fuerza de McCarthy pudo más y desplazó a Ames. "Me aprisionó con sus manos y pensé que iba a pegarme. Me rasguñó la cara y me tiró del cabello", contó.

En ese momento apareció Jason Williams, el padre, que sí consiguió sacarle a su hijo, y salió a la calle corriendo, con él en brazos. Pero la madre no estaba dispuesta a que le arrebataran a su presa, así que salió detrás de su esposo con tanta furia que terminó tropezándose al descender por la escalera que llevaba a la calle. Según David Bridge, otro testigo, "después de volar varios metros, golpeó el concreto y se levantó como si nada".

Al ver que ya no podía alcanzarlos, empezó a sacarse toda la ropa y a arrojársela a los transeúntes, exactamente igual que el caníbal de Miami. Luego de amenazar a las personas que circulaban en ese momento, dio media vuelta y volvió corriendo hacia su casa.

Tropezó nuevamente con las escaleras y, tras levantarse, encontró una nueva víctima: su perro, un pitbull.

En ese estado la encontraron los policías, que a pesar de que eran dos hombres, no podían detenerla. Hasta que le aplicaron una descarga con su pistola taser. Terminó muriendo en el hospital, horas después.

Tanto de McCarthy, 35 años, como del caníbal, se sospecha que estaban bajo el influjo de la mortífera droga que se vende por Internet como sales de baño. Parlamentarios están intentando sancionar una ley que prohíba la venta de esta sustancia.


La droga se vende bajo la "pantalla" de sales de baño. Ya es popular en Australia, EEUU e Inglaterra, donde causó la muerte de un joven de 24 años.

Agitación, contorsiones faciales, alucinaciones, ansiedad y dolor de pecho son algunos de los síntomas que 
produce la ola de marfil o ivory wave, la nueva droga de moda entre los jóvenes británicos, de Australia y EEUU. La sustancia es vendida en internet bajo la "pantalla" de sales de baño: "Ivory wave trae las vigorizantes aguas termales griegas a la comodidad de su hogar. Basta con añadir el contenido a un baño caliente", dice un anuncio colgado en la web.

Sin embargo, la sustancia es mucho menos inocente. Así lo aclara un reporte publicado en la revista 
Emergency Medicine Journal, el cual advierte que puede convertirse en "la nueva mefedrona", una droga sintética que fue prohibida en la Unión Europea luego de producir la muerte de, al menos, 37 personas.

La ola de marfil es un polvo blanco, café claro o gris, el cual puede ser consumido tanto por la nariz como
por la boca. Aunque no existe una fórmula única para su preparación, el principal ingrediente es la metilendioxi pirovalerona (MDPV), "un estimulante similar a la cocaína", según explica a La Tercera Juan Carlos Araneda, coordinador del proyecto de drogas sintéticas de la oficina de la ONU para las drogas y el crimen.

La MDPV produce un estado inicial de euforia y sobreestimulación de los sentidos, lo cual puede ir 
acompanado de una sobreestimulación del sistema cardíaco.
Para el toxicólogo Juan Carlos Ríos, subdirector del Centro de Información Toxicológica de la Universidad 
Católica (Cituc), el efecto es similar al producido por las anfetaminas y "puede aumentar el riesgo de sufrir infartos y arritmias cardíacas, además de aumentar la temperatura del cuerpo".   La MDPV pertenece a una familia de sustancias reconocidas por producir adicción y dependencia. "Probablemente, el uso crónico de esta droga genera el mismo efecto", dice Ríos. La ola de marfil también contiene lidocaína, anestésico local que puede provocar arritmias.

La sustancia es muy potente incluso en dosis pequeñas. En Inglaterra, un joven de 24 años murió luego de 
lanzarse a un acantilado bajo los efectos alucinógenos de la droga. "Aunque es una droga nueva, ya se reportan muertes, lo que indica que es muy riesgosa", advierte Ríos.

Los especialistas dicen que esta droga, al igual que el éxtasis, apunta a un público joven y de ingresos
medios y altos. De hecho, en internet, el paquete de 200 mg se vende a 24 dólares