El estudio, que monitoreó a 5 000 hombres franceses y otros 200 estadounidenses, muestra que las personas que utilizan la bicicleta durante cinco horas semanales o más registran índices de infertilidad elevados.
Esto se debe tanto a la ropa ajustada que aumenta la temperatura de los testículos, como al golpeteo de los genitales masculinos con el sillín, lo que reduce la cantidad y la calidad de los espermatozoides.
No obstante, la investigación aclara que las personas que realizan este ejercicio en general no corren ningún riesgo al respecto.
Los resultados de este estudio fueron presentados en la reunión de la Asociación Internacional para Problemas de Fertilidad de la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM, por sus siglas en inglés).