sábado, junio 07, 2014

Buen sueño reduce riesgo de padecer Alzheimer

El insomnio aumenta el riesgo de sufrir la enfermedad de Alzheimer, indican científicos estadounidenses.

El resultado de un estudio publicado el viernes por la revista “JAMA Neurology” muestra que tras una noche sin dormir aumentan los niveles de la proteína beta-amiloide, cuya acumulación en forma de placas en el cerebro lleva a desarrollar la enfermedad de Alzheimer.

“Creemos que el sueño normal y saludable ayuda a reducir la cantidad de beta-amiloide en el cerebro pero cuando se perturba se altera esta disminución”, apuntó Jurgen Claassen, autor principal del estudio.

Los científicos, para llegar a esta conclusión, eligieron a 26 hombres de mediana edad, que no sufrían de insomnio, y midieron sus niveles de beta-amiloide antes y después de acostarse. El resultado fue que la mitad de ellos durmieron sin ninguna interrupción y los demás no lograron dormir en toda la noche.

En este sentido, los expertos hallaron que los hombres que durmieron bien, redujeron un 6 % de media sus niveles de beta-amiloide en el líquido cefalorraquídeo durante la noche. Sin embargo, en quienes se mantuvieron despiertos no hubo cambios.

“Cuando esta falta de sueño se repite puede llegar a ser un factor de riesgo para desarrollar esta enfermedad neurodegenerativa”, advierte el estudio.

También, los científicos chinos y estadounidenses destacan que una buena noche de sueño mejora el aprendizaje.

El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que se manifiesta como deterioro cognitivo y trastornos conductuales.


Dormir bien mejora el aprendizaje


Un nuevo estudio desarrollado por los científicos de Universidades de China Y Estados Unidos revela que una buena noche de sueño mejora el aprendizaje y la memoria.

El trabajo de los científicos de la escuela de medicina de la New York University y de la Peking University consistió en entrenar a ratones para ejecutar una tarea que no conocían.

Los académicos usaron tecnología de microscopio avanzada para ver la sinapsis (las conexiones entre células madre del cerebro que se crean durante la etapa de sueño), y los resultados evidenciaron que los ratones que durmieron formaron muchas más conexiones entre las neuronas; de hecho, aprendían más.

Los investigadores, con la interrupción de fases específicas del sueño, demostraron que la etapa profunda del sueño es necesaria para la formación de recuerdos. Durante esa etapa el cerebro "reproducía" la actividad experimentada por el ratón mientras había estado despierto.

Por último se comprobó que, tras tres horas de entrenamiento, los ratones que dormían su siesta cumplían perfectamente cualquier tarea asignada. Por el contrario, los que no lograron conciliar el sueño no desempeñaban sus tareas de manera correcta.

Los resultados de la investigación, publicados en la revista “Science”, concluyen que con un buen descanso las probabilidades de lograr un óptimo desempeño en las actividades laborales o de cualquier índole son más elevadas.