De los cuatro asteroides avistados cerca de la Tierra, el más grande
es el 4034 Vishnu, con 800 metros de diámetro. Como referencia, el meteorito de Tunguska
que arrasó cientos de kilómetros de taiga de Siberia al impactar en la
región en 1908, tenía un diámetro de menos de 100 metros.
Los astrónomos prevén que el Vushnu 4034, descubierto en 1986, pase a casi 23 millones de kilómetros de la superficie de la Tierra. Sin embargo, el más cercano de los cuatro, el EN-89, que fue descubierto hace tan solo dos semanas, pasará a poco más de cinco millones de kilómetros. De los otros dos meteoritos aún no ha trascendido información.
Mientras la trayectoria de algunos cuerpos cósmicos puede preverse con mucha antelación, la de otros, como el meteorito de Cheliábinsk no se detecta hasta que entran en la atmósfera, lo que hace que el planeta se vuelva potencialmente vulnerable a impactos millones de veces más potentes que las peores explosiones nucleares.
Por otro lado, empresas como la estadounidense Astrorank, dedicada a evaluar la composición de los asteroides, plantean un escenario desde un punto de vista mucho más optimista: el 4034 Vishnu, que se compone en gran parte de platino, níquel y hierro, tiene un valor aproximado, según esta empresa, de unos 40.000 millones de dólares, más de la mitad del Producto Interior Bruto del mundo en 2012.
Los astrónomos prevén que el Vushnu 4034, descubierto en 1986, pase a casi 23 millones de kilómetros de la superficie de la Tierra. Sin embargo, el más cercano de los cuatro, el EN-89, que fue descubierto hace tan solo dos semanas, pasará a poco más de cinco millones de kilómetros. De los otros dos meteoritos aún no ha trascendido información.
Varios cientos de asteroides se aproximan mucho a la Tierra cada año”En total, "varios cientos de asteroides se aproximan mucho a la Tierra cada año”, explican los expertos de la NASA, pero es raro que tantos sobrevuelen la Tierra en un mismo día, subrayan.
Mientras la trayectoria de algunos cuerpos cósmicos puede preverse con mucha antelación, la de otros, como el meteorito de Cheliábinsk no se detecta hasta que entran en la atmósfera, lo que hace que el planeta se vuelva potencialmente vulnerable a impactos millones de veces más potentes que las peores explosiones nucleares.
Por otro lado, empresas como la estadounidense Astrorank, dedicada a evaluar la composición de los asteroides, plantean un escenario desde un punto de vista mucho más optimista: el 4034 Vishnu, que se compone en gran parte de platino, níquel y hierro, tiene un valor aproximado, según esta empresa, de unos 40.000 millones de dólares, más de la mitad del Producto Interior Bruto del mundo en 2012.