China no está sola a la hora de desplegar su actividad en África. Todos los países del grupo BRICS intensifican su papel en ese continente, pero cada uno de ellos elige su propio camino, asegura un analista de la República Sudafricana.
Pese a que la presencia china en el continente africano es cada año más notable (lo que da lugar a muchas especulaciones periodísticas y estudios académicos, con frecuencia contradictorios, sobre las consecuencias de este fenómeno) prácticamente ningún analista internacional aborda la cuestión de las actividades africanas de los otros Estados integrantes del grupo BRICS: India, Brasil, República Sudafricana y Rusia. El profundo estudio realizado por Patrick Carmody, profesor del Trinity College de Dublín, llena este hueco.
Una de las preguntas obvias planteadas es si la actividad de los Estados BRICS significa que el Gran Juego ha llegado al continente africano o si la interacción de los países en desarrollo es algo menos controvertida y en realidad satisface las necesidades de los pobres, indica el portal japonés The Diplomat.
En los primeros capítulos de su libro, Carmody sostiene la segunda opinión al asegurar que "los flujos de mercancías y de relaciones sociales son más equitativos y menos explotadores entre los Estados 'emergentes' del Sur que en las relaciones existentes entre el Norte y el Sur".
Carmody cita a otro investigador que destaca los siguientes puntos como las características más importantes de la cooperación entre países en desarrollo:
1) Todos los miembros [excepto Rusia, RT] comparten la experiencia de haber sufrido la explotación colonial y pueden considerarse países en desarrollo;
2) Como resultado del primer punto: todos tienen experiencia en usar tecnologías adecuadas a su nivel de desarrollo;
3) La negativa a construir una jerarquía en las relaciones internacionales y el énfasis en el respeto a la independencia de los miembros y la no injerencia en los asuntos de otros países;
4) El enfoque en la idea de 'desarrollo recíproco' y la búsqueda del beneficio mutuo.
Acerca de la actuación de los países BRICS en el continente africano, el autor dedicó cinco capítulos de su libro a la actuación en África de los cinco Estados miembros del grupo.
Una de las preguntas obvias planteadas es si la actividad de los Estados BRICS significa que el Gran Juego ha llegado al continente africano o si la interacción de los países en desarrollo es algo menos controvertida y en realidad satisface las necesidades de los pobres, indica el portal japonés The Diplomat.
En los primeros capítulos de su libro, Carmody sostiene la segunda opinión al asegurar que "los flujos de mercancías y de relaciones sociales son más equitativos y menos explotadores entre los Estados 'emergentes' del Sur que en las relaciones existentes entre el Norte y el Sur".
Carmody cita a otro investigador que destaca los siguientes puntos como las características más importantes de la cooperación entre países en desarrollo:
1) Todos los miembros [excepto Rusia, RT] comparten la experiencia de haber sufrido la explotación colonial y pueden considerarse países en desarrollo;
2) Como resultado del primer punto: todos tienen experiencia en usar tecnologías adecuadas a su nivel de desarrollo;
3) La negativa a construir una jerarquía en las relaciones internacionales y el énfasis en el respeto a la independencia de los miembros y la no injerencia en los asuntos de otros países;
4) El enfoque en la idea de 'desarrollo recíproco' y la búsqueda del beneficio mutuo.
Acerca de la actuación de los países BRICS en el continente africano, el autor dedicó cinco capítulos de su libro a la actuación en África de los cinco Estados miembros del grupo.