lunes, junio 04, 2012

Un «clip» para reparar la válvula mitral cardíaca sin cirugía

El Hospital Clínic de Barcelona, junto con otros hospitales de Andalucía, Madrid y Castilla y León ofrece la posibilidad de reparar la válvula mitral cardíaca sin pasar por el quirófano, gracias a la introducción de un dispositivo en forma de pinza, un «clip», por la vena femoral hasta el corazón. El Hospital Clínic de Barcelona, el primero que lo ofrece en Cataluña, es pionero en la introducción de técnicas no invasivas en distintas especialidades.



«Mitraclip» se introdujo en Europa en el año 2010 y en España, hospitales de Andalucía, Madrid y Castilla León comenzaron a utilizarlo hace tres meses. En el Clínic de Barcelona ya se han intervenido tres personas con este método, y se estima que puedan tratarse unas 15 enfermos al año.

La insuficiencia cardíaca es la enfermedad crónica más prevalente -la sufre más de medio millón de personas- y la segunda causa más frecuente de ingreso hospitalario en España, con un 2,5 % del global.

Para introducir el clip, se introduce un dispositivo en forma de pinza por la vena femoral que llega hasta el corazón guiada mediante una ecocardiografía esofágica, atraviesa las cavidades cardíacas y se engancha en los velos de la válvula mitral. El resultado es un «efecto pinza» que deja dos huecos de menor calibre, por lo que la sangre que antes se escapaba hacia afuera en cada contracción cardíaca ya no lo hace porque la válvula cierra mejor.


Selección de pacientes

El jefe del servicio de cardiología del Hospital Clínic de Barcelona, Manel Sabaté, ha puntualizado que no todas las válvulas mitrales afectadas son óptimas para colocar este clip. «Existen unos estrictos criterios anatómicos para su colocación que permiten enganchar bien el clip en los velos de la válvula. Además, se trata de un procedimiento complejo que requiere de hasta 98 pasos para colocar el clip», explica el médico.

La principal ventaja es que la intervención no necesita un quirófano para reparar la válvula. Sabaté explica que «se realiza en la sala de hemodinámica con anestesia, en lugar de un quirófano con cirugía extracorpórea. La recuperación y despertar postanestésico se produce en la misma sala de hemodinámica y la intervención dura aproximadamente unas dos o tres horas». Además, con este sistema se evita la cirugía a corazón abierto y el paciente está en casa a los dos días de ser intervenido.

«Este método mínimamente invasivo permite reparar la afección valvular a los pacientes más graves que presentan un elevado riesgo si se plantea reparar la insuficiencia valvular mediante cirugía», señala Sabaté. Sin apenas molestias ni complicaciones, el clip mejora la denominada «clase funcional» del corazón, razón por la que sufren ahogos los enfermos con valvulopatía mitral, y, además de mejorar los síntomas, hay un ahorro considerable de cirugías reincidentes.

La insuficiencia cardíaca es una enfermedad crónica en expansión y sin causa conocida que afecta por igual a hombres y mujeres a partir de 50 años y puede implicar una alta mortalidad y un número elevado de ingresos y reingresos hospitalarios. «Los pacientes con insuficiencia mitral funcional importante suelen reingresar a menudo», apunta Sabaté, que cree que con la nueva técnica «no tendrían que hacerlo, por lo que disminuiría la carga económica y asistencial por insuficiencia cardíaca en los hospitales».