Un
niño pequeño puede ahogarse «en un minuto y con treinta centímetros de
agua», según el Ministerio de Sanidad, que ha editado la guía-cómic «Disfruta del agua y evita los riesgos», donde se incluyen las conductas de seguridad que se deben adoptar para evitar este tipo de accidentes.
En
una entrevista concedida a Efe, la directora general de Salud Pública
del Ministerio de Sanidad, Mercedes Vinuesa, ha subrayado la importancia
de que los padres o personas que estén al cuidado de niños les «pongan chaleco salvavidas» y los tengan «siempre a la vista» cuando éstos se estén bañando.
El objetivo de la guía es prevenir las lesiones en los entornos acuáticos y recomendar las conductas de seguridad que se deben adoptar para evitarlas y está dirigida principalmente a niños y a los adultos responsables de su cuidado.
Además, el Ministerio ha advertido de que bañarse de noche o tras haber bebido alcohol es «muy arriesgado», y que también "el consumo de alcohol por los adultos responsables del cuidado de niños puede restar vigilancia".
Según ha afirmado Vinuesa, los jóvenes deben tener especial cuidado y no tirarse «desde balcones» o
desde «cualquier roca sin mirar el fondo», ya que estas prácticas
pueden provocar lesiones graves en la cabeza o en la espalda.
Sanidad
también advierte del peligro de realizar comidas copiosas durante los
días de actividad acuática o de hacer zambullidas o tirarse de cabeza de
primeras y recomienda hacer una «entrada progresiva, de manera que el cuerpo se vaya acostumbrando», ha dicho Vinuesa.
Así
mismo, la directora general de Salud Pública ha recomendado que, si una
persona se encuentra mal mientras está dentro del agua, lo más
recomendable es «avisar a algún compañero» y «colocarse hacia atrás e intentar ir hacia la costa», ya que en esta posición es «mucho más fácil y relajado nadar».
A partir de los 40 años «es cuando se producen más ahogamientos, sobre todo en aguas continentales, y es algo asociado a conductas más arriesgadas», por lo que es «particularmente importante llamar la atención de este colectivo», ha afirmado Vinuesa.
Más de 5.000 menores ahogados cada año
Cada
año fallecen por ahogamiento en Europa más de 5.000 menores de 19 años,
y los conatos de ahogamiento provocan secuelas graves con daños
cerebrales permanentes, según datos facilitados por Sanidad.
Según el Instituto Nacional de Estadística, durante el año 2010 en España, 432 personas fallecieron a consecuencia de un ahogamiento por sumersión, siendo el 77 por ciento de ellas varones, y se producen casi mil lesiones medulares al año.
Entre
los consejos incluidos en la publicación, el Ministerio recuerda que se
deben respetar las normas de seguridad, bañarse en zonas vigiladas por
los socorristas y que las piscinas privadas deben contar con un cercado
perimetral que las aísle de la vivienda y tener una altura de 1,2 metros
no escalables.
Con
respecto a los niños, la guía recoge que los cuidadores deben
vigilarlos atentamente cuando estén en el agua o cerca de ella.
La guía-cómic ha sido puesta a disposición de las comunidades autónomas y también está disponible en el web del Ministerio de Sanidad.