domingo, febrero 23, 2014

¿Por qué enfermedades del sistema nervioso protegen al cáncer?

Investigadores españoles han logrado detectar la posible base molecular de la relación entre las enfermedades del sistema nervioso central y un menor riesgo de padecer cáncer.

Según el trabajo publicado en la revista 'PLOS Genetics', existen al menos un centenar de genes que provocan el efecto protector que muestran ciertas enfermedades del sistema nervioso central, como el Alzheimer, el Parkinson y la esquizofrenia, ante el cáncer.

Para realizar este estudio, los investigadores cruzaron mediante análisis informáticos los datos de 1 700 individuos procedentes de 30 estudios sobre las citadas enfermedades del sistema nervioso y tres tipos de cáncer (colon, pulmón y próstata).

Según los resultados, 74 genes mostraron poca actividad en patologías cerebrales y una mayor en el caso del cáncer. Al contrario, 19 genes muy activos en enfermedades del sistema nervioso presentaron una actividad reducida en cáncer.

Los autores han asegurado que este trabajo podría dar lugar a estudios en los que se puedan probarse nuevos usos de fármacos ya conocidos.


Conflictos familiares afectan al desarrollo cerebral de niños


Los conflictos familiares frente a los niños pueden afectar al crecimiento del cerebro de un niño, lo que genera perturbaciones en la salud mental en la edad adulta, según un nuevo estudio realizado por los investigadores británicos.

La tensión entre los padres, los argumentos y la falta de afecto o de la comunicación entre los miembros de la familia puede afectar un área del cerebro involucrada en el aprendizaje de habilidades, la regulación del estrés y control sensorio-motor, indicó el estudio.

Los científicos de la Universidad de East Anglia, en el Reino Unido, al utilizar la tecnología de imágenes cerebrales, examinaron los cerebros de 58 adolescentes de entre 17 y 19 años de edad.

En esa tesis se pidió a los padres de los adolescentes informar eventos negativos que sus hijos habían sufrido desde el nacimiento hasta los 11 años de edad.

De acuerdo con los resultados, los adolescentes que se enfrentaron leves a moderados problemas familiares desde el momento en que nacieron hasta los 11 años, tenían un cerebro más pequeño.

Según los autores del estudio, un cerebelo más pequeño puede aumentar el riesgo de enfermedades mentales más tarde en la vida.