Por aire o por tierra, con o sin entradas, los argentinos están llegando masivamente a Río de Janeiro para la gran final del Mundial contra Alemania el domingo, muy a pesar de algunos cariocas.
El Sambódromo, escenario del famoso carnaval de Río, fue abierto para que acampen o instalen sus casas rodantes muchos argentinos y la playa de Copacabana es un punto de encuentro para la fiesta.
Allí pueden verse argentinos entonando cánticos de tribuna y, de paso, contando a hasta siete para recordarle a sus archirrivales brasileños la goleada 7-1 que sufrieron el martes con Alemania.
Lejos de ignorar las toreadas, algunos cariocas responden alentando por Alemania y augurando una derrota de Messi y compañía en el Maracaná.
Hasta ahora todo transcurre en clima de fiesta y en medio de una fuerte presencia de la policía, que ha detenido a algún argentino por incidentes aislados.
El corresponsal en Río, Gerardo Lissardy, recorrió Copacabana con su cámara y preparó este video sobre cómo viven argentinos y brasileños este momento.