Una investigación de la Universidad estadounidense Carnegie Mellon sobre
apariencia física muestra que los rasgos faciales influyen en
decisiones importantes, desde votar a un determinado candidato en unas
elecciones a juzgar a un acusado de un crimen.
“Nuestras
impresiones sobre la gente son modeladas por sus rostros, y como
consecuencia de ello, también lo son las decisiones sociales”, escriben
los autores en la edición de este miércoles de la revista ‘Trend in
Cognitives Sciences’.
La diferencia de este estudio con los
anteriores es que desarrolla métodos que permiten construir modelos
informatizados con los que se puede manipular los rasgos de una cara
para evaluar cómo cambia la percepción que tiene la gente sobre un
individuo.
De acuerdo con los investigadores, dejarse llevar
por los rasgos faciales puede acarrear consecuencias graves en ámbitos
como el sistema jurídico y financiero.
Christopher Olivola, el
autor principal de este estudio ha calificado de preocupante esta
tendencia y a su criterio habría que corregirlo o, al menos, mitigarlo.
En esta línea, propone reducir la influencia de estos rasgos faciales
subjetivos ofreciendo más información relevante a la gente.
“Los
votantes que conocen mejor a los políticos son menos propensos a tomar
decisiones basadas en su aspecto que aquellos que saben menos de ellos”,
ha sostenido Olivola.
El pasado mes de julio, un estudio de la
Universidad de York publicado en PNAS mostró cómo al ver una imagen,
rápidamente se forma un juicio sobre su carácter, por ejemplo, si es
amable, honrada o competente.