El Foro de Países Exportadores de Gas (FPEG), que se inició este lunes en Moscú, tiene como objetivo consolidar su posición en el mercado mundial ante la aparición de nuevos jugadores como EE.UU.
En su discurso inaugural, el presidente Putin señaló que el objetivo clave de la cumbre del FPEG debe ser crear condiciones que permitan reducir el exceso de volatilidad en los precios del gas.
"Creo que el principal reto del foro debe ser desarrollar posiciones conjuntas respecto a los precios, crear las condiciones necesarias para reducir la excesiva volatilidad de los precios y aumentar la transparencia en toda la industria para contribuir al desarrollo de la infraestructura del transporte y aumentar la seguridad del suministro", afirmó Putin.
Por su parte, el mandatario boliviano, Evo Morales, instó a los países exportadores a mantener "un precio justo del gas que esté asociado a la evolución del precio del petróleo y al desarrollo sostenible en armonía con la Madre Tierra".
Los países del FPEG (Argelia, Bolivia, Venezuela, Egipto, Rusia, Irán, Irak, Qatar, Libia, Nigeria, Omán, Trinidad y Tobago, Guinea Ecuatorial y Emiratos Árabes Unidos) no quieren perder la ventaja de aglutinar casi la mitad de todas las exportaciones mundiales del gas convencional y el 65% de sus reservas demostradas.
América Latina está representada por los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Venezuela, Nicolás Maduro, en la segunda cumbre de mandatarios del foro de este año.
El ministro ruso de Energía, Alexánder Novak, aseguró que el FPEG se enfrenta a un nuevo reto denominado la "revolución de esquisto" en EE.UU., en referencia a la extracción por fractura de gas de esquisto o gas pizarra que ha cambiado "la geografía de la oferta de gas licuado" a nivel mundial.
Novak aseguró además que el FPEG no pretende convertirse en un "cártel gasífero" que imponga sus condiciones a los consumidores.
El ministro dejó claro que esta entidad planea constituirse en una plataforma de asociación mutuamente ventajosa para coordinar esfuerzos en el proceso del suministro de gas a la población como fuente energética más ecológica y accesible, aseguró en entrevista a la agencia Interfax.
Por su parte, la Organización Internacional de la Energía (OIE) reconoce que el incremento de la producción no convencional de gas (en referencia al gas de esquisto) en EE.UU. podría convertir a ese país en un importante exportador de gas natural licuado, una perspectiva que será seguramente tratada por los participantes de la cumbre en Moscú.
"Creo que el principal reto del foro debe ser desarrollar posiciones conjuntas respecto a los precios, crear las condiciones necesarias para reducir la excesiva volatilidad de los precios y aumentar la transparencia en toda la industria para contribuir al desarrollo de la infraestructura del transporte y aumentar la seguridad del suministro", afirmó Putin.
Por su parte, el mandatario boliviano, Evo Morales, instó a los países exportadores a mantener "un precio justo del gas que esté asociado a la evolución del precio del petróleo y al desarrollo sostenible en armonía con la Madre Tierra".
Los países del FPEG (Argelia, Bolivia, Venezuela, Egipto, Rusia, Irán, Irak, Qatar, Libia, Nigeria, Omán, Trinidad y Tobago, Guinea Ecuatorial y Emiratos Árabes Unidos) no quieren perder la ventaja de aglutinar casi la mitad de todas las exportaciones mundiales del gas convencional y el 65% de sus reservas demostradas.
América Latina está representada por los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Venezuela, Nicolás Maduro, en la segunda cumbre de mandatarios del foro de este año.
El ministro ruso de Energía, Alexánder Novak, aseguró que el FPEG se enfrenta a un nuevo reto denominado la "revolución de esquisto" en EE.UU., en referencia a la extracción por fractura de gas de esquisto o gas pizarra que ha cambiado "la geografía de la oferta de gas licuado" a nivel mundial.
Novak aseguró además que el FPEG no pretende convertirse en un "cártel gasífero" que imponga sus condiciones a los consumidores.
El ministro dejó claro que esta entidad planea constituirse en una plataforma de asociación mutuamente ventajosa para coordinar esfuerzos en el proceso del suministro de gas a la población como fuente energética más ecológica y accesible, aseguró en entrevista a la agencia Interfax.
Por su parte, la Organización Internacional de la Energía (OIE) reconoce que el incremento de la producción no convencional de gas (en referencia al gas de esquisto) en EE.UU. podría convertir a ese país en un importante exportador de gas natural licuado, una perspectiva que será seguramente tratada por los participantes de la cumbre en Moscú.