El
primer vuelo comercial de la compañía tailandesa de bajo coste PC
Airline hará a comienzos del próximo marzo la ruta entre Bangkok y la
ciudad china de Tianxin y, para evitar eventuales incidentes en los
controles aeroportuarios, las azafatas llevarán un certificado médico de
cambio de sexo que aclarará que son las titulares de su pasaporte,
expedido a nombre de un varón.
"Mi
objetivo es dar una oportunidad a los transexuales, que son personas
con los mismos derechos que cualquiera. Esta compañía es un sueño para
ellas y para mí", explicó Peter Chan, fundador de la aerolínea pionera
en la contratación personas del tercer sexo para desempeñar el trabajo
de asistente de vuelo.
"Muchos transexuales tienen buena educación, pero no pueden aspirar a buenos trabajos. No eligen nacer así, ¿por qué los castiga la sociedad?", apuntó con énfasis Chan, un emprendedor tailandés de 45 años que ha tenido muchos trabajos, incluido el de azafato.
Las autoridades de aviación civil de Tailandia, Hong Kong y Laos han dado su visto bueno a la iniciativa de PC Airline
de que su avión vuele en ocasiones a estos países con una tripulación
compuesta por azafatas transexuales, pero Chan aún espera una respuesta
de las niponas y surcoreanas, que estudian el caso.
"Tengo
confianza de que no habrá problemas, aunque las azafatas tendrán que
enseñar un certificado médico porque en sus pasaportes aún aparecen como
caballeros", explicó Chan.
"Los
transexuales que contratamos pasaron un examen general de
conocimientos, idiomas y pruebas de aptitudes, en esto todos los sexos
son tratados igual", dijo el presidente de la compañía.
"No
sé si vamos a atraer más clientes porque algunas de nuestras azafatas
sean transexuales, pero lo cierto es que al pasajero le será muy difícil
o casi imposible diferenciarlas de cualquier otra mujer", puntualizó.
En
Tailandia, los transexuales gozan de cierta aceptación social y
trabajan en variopintos programas de televisión, en el mudo del cine,
comercios de artículos destinados a la clientela femenina, salones de
belleza, pero son muy pocos los que desempeñan trabajos en la
administración pública o son directivos de empresas privadas.
El
pasado enero, un avión con el equipo de PC Airline y decenas de
funcionarios tailandeses realizó un vuelo chárter entre Bangkok y
Vientiane, la capital laosiana, para promocionar la aerolínea en la
prensa que resultó un éxito publicitario.
"Setenta
millones de dólares, eso me ha costado mi sueño. Todo la inversión ha
salido de mi bolsillo", concluyó Chan, quien con 15 años consiguió su
primer empleo para ayudar a sus padres a salir de una situación
económica precaria.