A diferencia a de los procesos electorales pasados, los candidatos, partidos políticos, autoridades electorales y los votantes, contarán con nuevas heramientas tecnológicas, las cuales demostraron tener gran influencia el año pasado, durante los cambios sociales ocurridos en algunos países, como Egipto.
Antoni Gutiérrez-Rubí, asesor en comunicación y consultor político, platicó sobre cómo las nuevas tecnologías juegan un papel importante en los procesos electorales actuales; dio algunas recomendaciones para aprovechar su potencial, y compartió su visión de la forma en que se vivirán las elecciones en los próximos años.
"Las redes sociales e internet, son actualmente la máxima energía democrática y cívica, pues es ahí donde se encuentra una parte importante del debate", así lo afirmó Antoni, pues asegura que a pesar de que el tema llega a abordarse de forma banal en algunas ocasiones, son muchos los usuarios que mantienen conversaciones sobre política con gran intensidad y profundidad.
Por esta razón es importante que en una campaña política se considere a las redes sociales como parte de su estrategia de comunicación, además, hay que tomar en cuenta que actualmente los medios tradicionales usan estas herramientas como una forma de monitorear la opinión pública, para así decidir qué puntos y cómo abordarlos en sus publicaciones de materia política.
De acuerdo a las experiencias de otros países como Estados Unidos, el cual durante su proceso electoral de 2008 se convirtió en la primer nación en integrar a las redes sociales en sus campañas, Antoni asegura que si se usa una mala estrategia de comunicación en estas plataformas, las consecuencias pueden ser muy negativas; incluso, al punto de obtener la derrota.
Lo anterior se demostró con el hecho de que las redes sociales no fueron una parte adicional a las campañas políticas, sino que se convirtieron en el epicentro de las elecciones, factor que supo aprovechar el actual presidente estadounidense, Barack Obama.
Este fenómeno en realidad no es nada nuevo, pues las personalidades e instituciones políticas, siempre han buscado estar al tanto de la opinión pública y sus cambios; por ello es que realizan continuamente encuestas, entre otras herramientas para obtener la información que necesitan.
La diferencia con las redes sociales es que se tiene un contacto más directo con los usuarios y que al conectarse a ellas, se puede saber con mayor precisión sus opiniones y necesidades, mostrando incluso mayor transparencia e interés de mantener una comunicación bidireccional, y así aumentar el prestigio, junto con la confianza de los votantes.
¿Cómo actuar? Para manejar adecuadamente y aprovechar al máximo las redes sociales en una campaña electoral, el consultor político recomienda lo siguiente:
Tener capacidad de escucha. Si bien esto debe ser fundamental en todos los aspectos del desarrollo político, en las redes sociales no es la excepción, hay que saber escuchar y analizar bien la información que circula por ellas.
Aproximación. Es necesario estar más cerca de los ciudadanos a través de las redes sociales, pues la vieja política en la que existe una barrera, no puede ser aplicada a los nuevos medios, pues sería marcar el camino directo al fracaso.
Lo mismo se debe considerar en la utilización de la publicidad a través de las nuevas tecnologías, pues en ellas "se hacen viejos los ADN's clásicos". Hay que aproximarse comprendiendo las nuevas reglas.
Construir. La generación de contenidos es muy importante, pero no sólo se trata de ser unidireccionales, hay que relacionar la información, enlazarla con otras fuentes, mencionarlas, aportar cosas nuevas.
La tecnología social es el espacio ideal para generar una buena reputación, por lo que también es bueno diferenciar cuándo el equipo de asesores está interactuando y cuándo es el mismo personaje político quien lo hace, según sea el caso.
Enfoque a las causas. En muchas ocasiones, se comete el error de enfocar la comunicación hacia lo que es la marca o la insignia que se representa, alejándose de lo más importante, que es tener intercambio de ideas en base a las causas que se plantean.
Esto ayuda a que las propuestas sean horizontales y que se rompa la barrera que normalmente se genera desde la trinchera del partido.
¿Qué viene?
El futuro de los procesos electorales se encuentra, definitivamente, en las nuevas tecnologías. Basta accesar a cualquier buscador de internet y colocar el nombre de algún político para comprobarlo, pues de 10 resultados que se obtengan, de cinco a seis serán relacionados con alguna red social
También, es importante tomar en cuenta que los ciudadanos digitales son una gran potencia; poseen gran influencia, mantienen comunicación, crean y opinan, además de que cada vez son más los que tienen en sus manos una de las herramientas más poderosas de la actualidad, el smartphone.
La trascendencia de esto radica en que la tasa de penetración en tiempo y espacio a nivel global, está aumentando rápidamente y de una forma muy intensa. Tan sólo ahora existen alrededor de 5 mil 500 millones de teléfonos móviles, y se calcula que para el 2015 habrá tantos teléfonos como habitantes.
Aunque en algunos países como México el porcentaje de habitantes con acceso a este tipo de tecnologías sea menor, estos representan a los sectores más dinámicos, activos y determinantes en aspecto económico y social.
Por otro lado, las tecnologías serán cada vez más baratas, rápidas y tendrán una mejor relación con el usuario, permitiéndole interactuar de maneras más sencillas, como con el reconocimiento de voz e interfaces más visuales, todo ello en la palma de la mano.
Ante todo esto, es imposible no cuestionarse cuánto falta para que una jornada electoral será completamente digital, es decir que se pueda votar de una forma remota y segura. Antoni comenta que actualmente existe la tecnología suficiente para que el voto remoto se lleve a cabo y sin mayores riesgos de seguridad debido a los grandes avances que se han tenido en tecnologías de identificación, pero para que esto sea realidad, es necesario que exista mayor determinación política.
El voto remoto traería ventajas principalmente en dos aspectos, por un lado su cómputo sería inmediato y daría resultados más confiables; y por el otro, ya no sería necesario utilizar tantas papeletas, lo que ayudaría al cuidado del ambiente.
Si deseas conocer más sobre el trabajo de Antoni Gutiérrez-Rubí, puedes adquirir su más reciente libro titulado "La Política Vigilada: La comunicación política en la era de Wikileaks", además puedes consultar su sitio web gutierrez-rubi.es y seguirlo a través de Twitter en @antonigr.