Hace ya más de un año que se habla de Blackberry 10, el
nuevo sistema operativo con el que la canadiense RIM pretende recuperar
el esplendor que tenía antes de la llegada de los iPhone y los móviles
basados en Android. Y ahora, tras varios retrasos, revisiones,
correcciones y mejoras, el momento ha llegado.
Será el próximo día 30, en el transcurso de una
presentación que promete ser histórica. Junto al nuevo SO, en efecto, se
desvelarán los primeros terminales asociados al nuevo sistema operativo:
serán, a todas luces, dos versiones de un mismo dispositivo, llamado
Z10. Una con teclado físico (para los acérrimos de la marca) y otro con
un novedoso teclado virtual. A lo largo del año, se espera que RIM ponga
en el mercado por lo menos otros cuatro modelos.
Como ya es más que sabido, BB10 incorpora una novedosa
interfaz llamada Flow y basada en un sistema de gestos, que, aplicados a
la pantalla táctil, permiten controlar las funciones del teléfono de
una forma completamente nueva y diferente a la que estamos
acostumbrados. Y es esa la característica que, precisamente, puede ser
el punto más fuerte (o el más debil) de la nueva apuesta de la firma.
Todo depende de las ganas de aprender nuevos sistemas que tengan los
usuarios.
Hay teorías para todos los gustos. Quien lo ha probado
asegura que, tras un breve aprendizaje, todo sucede de una forma natural
y lógica. Otros, sin embargo, dudan que el consumidor medio quiera
hacer el esfuerzo de aprender a manejar el nuevo interfaz para sacar
todo el provecho del nuevo software. Especialmente en un mercado que,
desde hace años, está dominado por una forma de hacer las cosas que todo
el mundo conoce. Planea, además, la pregunta que muchos analistas se
llevan haciendo ya desde hace meses: ¿Será demasiado tarde?
Las expectativas, desde luego, son enormes y, tras un largo
(demasiado largo) silencio, los medios especializados vuelven a hablar
maravillas de la marca que primero logró hacer que un móvil sirviera
para algo más que hablar. Para empezar, y según afirma la propia RIM,
los nuevos dispositivos llegarán al mercado con un amplio catálogo de
más de 70.000 aplicaciones disponibles.
Por otra parte, las reservas del Z10 (aunque su número
total se desconoce) crecen a buen ritmo, según afirman algunos de los
mayores distribuidores estadounidenses. Por último, los análisis,
totales o parciales, que ya han aparecido sobre BB10 se deshacen en
elogios sobre la robustez y solvencia de este sistema operativo basado
en QNX, empresa de software adquirida por RIM hace unos años y cuya
especialidad era la creación de SO para vehículos militares y
automóviles de alta gama. Los distintos operadores, además, hacen ya
todo tipo de pruebas sobre las diferentes redes, al parecer con óptimos
resultados.
De lo que no cabe duda, es de que el nuevo sistema
operativo incorpora algunas características prometedoras. Entre ellas,
un nuevo navegador optimizado para HTML 5, un nuevo y revolucionario
«teclado virtual adaptativo» y una nueva interfaz, Blackberry Hub, que
es capaz de mostrar todos los mensajes (correos, SMS, actualizaciones de
Facebook y Twitter...)
en una única pantalla. Todo ello unido al ya mencionado sistema de
gestos (Flow) que permiten acceder y controlar las diferentes funciones
de los terminales. Puede verse este vídeo de «Muy Computer» para hacerse una idea bastante detallada de las capacidades y la forma de funcionamiento del nuevo sistema operativo.
Todo está preparado, pues, para el gran día. Un 30 de enero
que puede significar el regreso de Blackberry a la primera línea de la
telefonía móvil, o bien el último coletazo de un gigante (otro) que ve
alejarse para siempre sus días de gloria.