martes, enero 29, 2013

Las construcciones rupestres más sorprendentes

Nuestros antepasados dejaron huella de su impresionante arquitectura alrededor del mundo, entre ellas la ciudad de Petra, las Viviendas de Gila y los templos de Abu Simbel.

El hombre ha creado construcciones impresionantes con diversos materiales alrededor del mundo como la Torre Eiffel, la Casa de la Ópera de Sídney o la torre Burj Khalifa de Dubai, el edificio más alto del mundo con 828 metros, sin embargo, existen otras edificaciones, un tanto más rústicas, que sin duda dejan a más de uno sorprendido.


Acantilado Gila/ Estados Unidos. Las Viviendas del Acantilado Gila se encuentran dentro del Parque Natural de Gila, en Nuevo México. Los humanos que habitaron esta región hace miles de años aprovecharon las cuevas existentes para hacer sus casas. La gente vivó en Mogollon entre 1275 - 1300 aC., la razón de su abandono después de tan poco tiempo no se conoce. Hay 46 habitaciones en las cuevas que se cree que ha sido el hogar de alrededor de quince familias.

 
Monumento Nacional Bandelier/ Estados Unidos. Bandelier es conocido por sus altiplanicies, cañones de paredes escarpadas y varios miles de viviendas del ancestral pueblo de indios americanos que se encuentran entre éstos. Los lugares arqueológicos más conocidos son los del cañón Frijoles, cerca del Centro para visitantes, fueron habitados desde el siglo XII hasta mediados del siglo XVI; los primeros grupos habían utilizado el área durante miles de años. En el sitio se pueden ver casas, edificios ceremoniales y pinturas rupestres.

 
Mesa Verde/ Estados Unidos. El altiplano de Mesa Verde alcanza más de 2 mil 600 metros de altura; el cual alberga una gran cantidad de viviendas de los indios Anasazi, construidas entre los siglos VI y XII. Se han localizado unos 4 mil 400 sitios, entre los que figuran aldeas erigidas en lo alto de la meseta y viviendas de imponentes dimensiones construidas con piedra en farallones rocosos, que cuentan con más de cien habitaciones en algunos casos.

 
Las Cuarenta Casas/ México. Es una Zona de Monumentos Arqueológicos que cuenta con edificaciones de tierra y madera que fueron construidas dentro de abrigos rocosos y acantilados de las barrancas de la Sierra Madre Occidental.  Los arqueólogos denominan a este tipo de sitios "Casas Acantilado". En los últimos 10 años de investigación se ha registrado más de 180 sitios de este tipo en la zona.  

La denominación de "Las Cuarenta Casas" es un toponímico acuñado por Alvar Núñez Cabeza de Vaca en el siglo XVI y desde entonces usado por los vecinos del lugar, para designar un número indeterminado de viviendas construidas ahí.

 
Ellora/India. Esta zona arqueológica se encuentra a 30 kilómetros de la ciudad de Aurangabad, y fue construida por los gobernantes Rashtrakutta. Es conocido por sus cuevas monumentales, las cuales son consideradas Patrimonio de la Humanidad. Estas cuevas representan el punto álgido de la arquitectura en roca de la India. Las 34 cuevas de Ellora son en realidad estructuras excavadas en la cara vertical de los cerros Charanandri, y son monasterios y templos budistas, hinduistas y jainíes que se construyeron entre los siglos V y X.

 
Las cuevas de Ajanta/ India. También se encuentran en la ciudad de Aurangabad, y su nombre significa "Piedra del Trono". Esta ciudad fue declarada por la Unesco Patrimonio de la Humanidad en 1983, por sus bellísimos monumentos históricos.

Las cuevas de Ajanta constan de 31 cuevas cavadas en roca que datan del siglo II a.C. Estas cuevas incluyen pinturas y esculturas consideradas obras maestras dentro del arte budista y también tiene unos frescos que recuerdan a las pinturas Sigiriva de Sri Lanka.

 
Las cuevas de Longmen/ China. Los artistas budistas trabajaron en la roca dura que se encontraba en el acantilado y crearon personajes religiosos (cerca de 100 mil) que fueron distribuidos a los largo de  mil 400 cuevas. Las mismas en diferentes medidas y actitudes saludan al sol que se asoma en la orilla opuesta.

El trabajo comenzó en el año 492 d.C y continuó por 500 años más. Desde 2000 son un Patrimonio de la Humanidad que dan cuenta principalmente del arte de la famosa dinastía Tang.

 
Petra/ Jordania. Se trata del tesoro más preciado de Jordania y su atracción turística más importante. Petra es una enorme ciudad excavada por completo en las rocas por los nabateos, una tribu árabe muy trabajadora que se estableció en la zona hace más de 2 mil años y la convirtió en una importante ciudad de paso que unía las rutas de la seda, las de las especias y otras que conectaban a China, la India y el sur de Arabia con Egipto, Siria, Grecia y Roma.

Los colores rojizos y las formaciones de las rocas son impactantes. La fachada llamada Al-Khazneh (el Tesoro), es la más admirada mide 30 m de ancho y 43 m de alto, se construyó en el siglo I como la tumba de un importante rey nabateo y es una muestra del talento para la ingeniería de este antiguo pueblo.


Templos de Abu Simbel/ Egipto. Se trata de dos santuarios excavados en la roca, mandados a hacer  por el faraón Ramsés II durante su reinado (1279-1213 a.C) para conmemorar su victoria en la batalla de Qadesh (ca. 1274 a.C.).  El templo de Ramsés II es el más grande que este faraón ordenó construir en Nubia mientras que el templo menor está dedicado a Nefertari, su primera esposa. Ambos se encuentran situados en el margen izquierdo del Nilo al sur del actual Egipto, muy cerca de la frontera con Sudán.

Su construcción duró unos 20 años y su propósito era impresionar a los vecinos del sur, así como reforzar la influencia de la religión de los faraones en la región.

 
Lalibela/ Etiopía. En esta ciudad se pueden apreciar iglesias que fueron talladas en roca, y es considerado como uno de los lugares más sagrados del país; fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1978.

Las iglesias de Lalibela se distribuyen en dos grupos principales, separados por el canal de Yordanos, que representa el río Jordán, pero comunicadas entre sí por túneles, pasadizos y trincheras. El lugar se concibió para que su topografía correspondiera a una representación simbólica de Tierra Santa, y fueron talladas en la roca viva sobre el año 1200.