Desde cómo configurar el navegador, hasta cómo usar las redes Wi Fi y el celular, las recomendaciones de los expertos en vulnerar sitios y otros sistemas digitales.
Configurar el navegador para evitar que seamos espiados, evitar los sitios que despiertan sospechas, mucho sentido común, desconfianza de quienes regalan cualquier cosa en Internet y mantener el software actualizado. Estas son algunas de las recomendaciones de tres hackers para quienes quieren mantener su privacidad en Internet. Es decir, navegar sin dejar ningún rastro.
Es sabido que la irrupción de Internet nos acercó todo tipos de beneficios. Pero al mismo tiempo nos dejó mucho más expuestos ante
empresas, gobiernos y a delincuentes que buscan capturar datos para su
propio provecho. Para saber cómo cuidar nuestra privacidad, Código Tek consultó a quienes más saben acerca de la vulneración de sitios y sistemas digitales.
Alfredo Ortega, investigador en seguridad informática y cofundador de Groundworks Technologies recomienda, ante todo, mantener la calma, aunque también estar siempre seguros que los sitios que uno navega sean confiables,
y especialmente si se va a tipear un passward asociado a una cuenta
bancaria. Además, recomienda no descargar software de sitios de los que
uno desconfía, porque "es muy probable de que estén infectados".
"Si
uno sigue una navegación normal y usa un sistema operativo moderno, que
lo protege bastante, no es para preocuparse tanto. Pero no hay que dejar de estar atento", advierte Ortega.
Una de las grandes preocupaciones de los usuarios es qué hace Google con nuestra navegación.
Y lo cierto es que el buscador va registrando, paso a paso, cada uno de
los movimientos que hacemos dentro de sus servicios web, desde el mismo
buscador hasta YouTube o Google Maps.
Lo ideal es usar Google sin estar logueados,
pero aún así no se puede evitar que el buscador siga nuestra
navegación. Para no dejar absolutamente ninguna huella , los
especialistas recomiendan usar directamente otro motor de búsqueda, como
Bing –de Microsoft--, o mejor aún Duck Duck Go, que no trackea ninguna información del usuario.
En el mismo sentido, Ortega recomienda no loguearse nunca antes de mirar un video en YouTube. Y en el caso de Facebook, loguearse, usarlo, y luego desloguearse. De otro modo, la red social está en condiciones de seguir trackeando la
navegación de los usuarios, y así obtener más información sobre gustos
personales para alimentar sus bases de datos que luego ofrecen a los
anunciantes.
Aunque reconoce no es un usuario asiduo de antivirus,
Sebastián Muñiz, cofundador de Groundworks Technologies, dice que si
tuviera que recomendar uno, elegiría AVG, que es "una de las opciones
más fáciles de instalar y que más colaboran con los usuarios a nivel
usabilidad." "Para el usuario no experimentado el antivirus aporta mucho
más de lo que puede perjudicar", agrega.
Ortega destaca que utilizar Wi Fi público implica un riesgo,
siempre que no se ingrese a través de una clave, porque cualquiera que
tenga el conocimiento suficiente puede capturar la información que uno
está enviando y recibiendo a través de esa conexión.
Otro elemento a considerar son los teléfonos móviles
que, en su versión inteligente, son tan avanzados que se transformaron
en verdaderas computadoras, con todos su pros, pero también con los
riesgos de ser espiados. "El principal riesgo aquí se presenta con los
celulares con Android, que tiene muchísimas aplicaciones cargadas con software malicioso", advierte Ortega.
"La
privacidad en Internet es una cuestión bastante complicada –agrega
Francisco Amato, experto en seguridad informática de Infobyte Security
Research--, especialmente porque hay factores que no dependen de uno,
como la comunicación que pasa por proveedores, generalmente privados,
hasta que llegan al sitio final, y hay ciertos puntos en donde tu
comunicación puede ser vulnerada. El celular también comunica todo el
tiempo donde estás, porque se comunica con una celda, y eso permite
ubicarte en todo momento"
En definitiva, el mensaje es siempre el mismo: navegar sin miedos, pero es sí, con prudencia.