domingo, marzo 17, 2013

Un gran paso para los «biodientes»

Un equipo del King's College de Londres ha logrado regenerar dientas partir de las células de las encías.

Un equipo del King's College de Londres (Gran Bretaña) ha logrado regenerar dientas partir de las células de las encías. Los resultados, afirman, podrían, en un futuro, reemplazar los dientes caídos por piezas que crecerán a partir de células de las encías.

Los expertos obtuvieron las células del tejido de encía adulto y las combinaron con otro tipo de células de ratones para hacer crecer un diente. Los científicos aseguran que, utilizando una fuente disponible de células, la técnica podría estar a disposición de los pacientes en el futuro.

Trabajos previos se han centrado en el uso de células madre embrionarias para crear «biodientes». Sin embargo, a pesar de que se ha demostrado que es posible hacer crecer un diente, es método caro y poco práctico para su uso diario en la clínica. En este último estudio, que se publica en Journal of Dental Research, los investigadores obtuvieron las células epiteliales de las encías de pacientes y desarrollaron algunas más en el laboratorio para mezclarlas con células mesenquimales (un tipo de células madre) procedentes de ratones.


Híbridos


A continuación cultivaron las células mesenquimales para que actuaran como «inductoras», es decir, para que instruyan a las células epiteliales a que comiencen a crecer como un diente. Al transplantar la combinación de células en ratones, los investigadores fueron capaces de desarrollar dientes híbridos humano/ratón que tenían raíces viables.

El siguiente paso, afirman, será conseguir una fuente fácilmente accesible de células mesenquimales humanas y cultivar suficiente cantidad para que sea una técnica útil para llevar a cabo en la clínica. Según el coordinador del trabajo Paul Sharpe, se podrían encontrar células mesenquimales en la pulpa de las muelas de juicio, entre otros lugares, pero que la dificultad consiste en conseguir la cantidad suficiente de ellas.

«Este avance significa que hemos identificado una población de células que podría contemplarse en el uso odontológico. Ahora estamos trabajando para tratar de identificar una forma sencilla de obtener células embrionarias», explicó Sharpe. Y agregó: «El gran reto, a partir de ahora, consiste en identificar una forma de cultivar células (humanas) adultas mesenquimales para que sean inductoras». Sharpe comentó que la esperanza es que un día la tecnología pueda sustituir a los implantes dentales de hoy, que no pueden reproducir una estructura desde la raíz natural. Además, la fricción al comer y otros movimientos de la mandíbula pueden causar desgaste en el hueso alrededor del implante.