Un día después de haber conseguido un asiento en esta organización, el país árabe rechaza convertirse en miembro, alegando que la misma es incapaz de asumir sus responsabilidades en la defensa de la seguridad y la paz en el mundo.
"El Reino de Arabia Saudí considera que tanto los métodos como los mecanismos de trabajo y el doble rasero del Consejo de Seguridad, le impiden ejercer adecuadamente sus funciones y asumir sus responsabilidades en defensa de la seguridad y la paz en el mundo", ha informado el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
Se debe mencionar que la decisión de Riad se produce en momentos en que la nación árabe está ofreciendo todo tipo de ayuda a los terroristas en Siria.
En este sentido, una unidad del Ejército sirio irrumpió en un almacén situado en el barrio de Jobar, en Damasco, y encontraron barriles de gas tóxico con etiquetas, donde se leía que eran de fabricación saudí.
Asimismo, desde hace varios años, la monarquía árabe viene reprimiendo a su población, inconforme por las políticas represivas del régimen.
Los manifestantes, entre todas demandas, piden el fin de la injerencia del régimen de Al Saud en los asuntos internos de los países de la región, la liberación de los presos políticos, libertad de expresión y la aplicación de reformas políticas.