Pero no son los únicos casos: múltiples empresas de menor tamaño intentan hacerse su hueco aprovechando todas las características de Android para nuevos gadgets, como es el caso del espejo retrovisor que incluye un ordenador Android.
Dicho retrovisor incluye una pantalla de 5 pulgadas (800 x 480) con una cámara para grabar vídeo. En su núcleo, cuenta con un procesador de 1.2 GHz, 512MB de RAM y 8GB de memoria interna, así como ranura para tarjetas microSD. De serie, trae la versión Ice Cream Sandwich. La batería es pequeña (650mAh), pues se presupone que estará conectado al cargador del coche, por lo que la autonomía no es algo crítico
Este dispositivo podrá ser utilizado como navegador GPS, cámara para grabar (DVR), manos libres Bluetooth… y tiene un precio de 226 dólares.
La idea es buena y puede ser útil, pero ¿puede tratarse de un widget que haga perder la atención a los conductores? Todos estos puntos hay que tenerlos en cuenta a la hora de diseñar un gadget de estas características
Muchos de ellos aparecen tras campañas de crowdfunding, las cuales algunas consiguen la inversión necesaria, aunque muchas de ellas no. Pero, ¿son estos gadgets realmente una revolución para la sociedad o tratan de sumarse a un sector de moda? Sólo el tiempo nos dirá cuáles pasaron a la historia.