El proceso, publicado en el portal “Medical News Today”, explica que los tejidos de los pulmones de los niños estaban demasiado dañados para ser trasplantados.
Los investigadores tomaron uno de los pulmones de cada par como esqueleto, formado tan solo por las principales proteínas en el tejido conectivo, colágeno y elastina, y después lo sumergieron en líquido nutritivo.
Tras 4 semanas de espera, los científicos, obtuvieron un pulmón humano completo, con la diferencia de que era más rosado, más suave y menos denso que el órgano normal.
Joan Nichols, una de las investigadoras de UTMB, afirma que el siguiente paso será probar los pulmones en cerdos. Estima que, en un periodo aproximado de 12 años, estos pulmones creados en laboratorio se podrán usar para trasplantes.