jueves, junio 28, 2012

La justicia neozelandesa considera irregular el registro de Megaupload

El Alto Tribunal de Nueva Zelanda enumeró hoy diversas irregularidades en el registro policial de la mansión del fundador de Megaupload, Kim Schmitz o Dotcom, y declaró ilegal la confiscación de las copias de sus discos duros.

La jueza Helen Winkelmann indicó que parte de los objetos confiscados deberán ser devueltos a Dotcom, detenido el pasado enero en su vivienda en las afueras de Auckland en un operativo que llevó al cierre del portal de descargas, informó la agencia local APNZ.

"Las categorías de objetos fueron definidos de tal manera que ellos inevitablemente podrían ser catalogados como material relevante e irrelevante. La Policía actuó bajo esta autorización. Las órdenes de allanamiento no pueden autorizar la incautación de material irrelevante y por lo tanto son inválidas", según el fallo.

Además la juez decidió que la clonación de los discos duros por parte del FBI, que se llevó las copias a Estados Unidos, es inválida porque Dotcom nunca les dio el consentimiento para hacerlo y ordenó a un abogado independiente que revise todo el material confiscado para determinar lo que es relevante para la investigación.

El material relevante se entregará a las autoridades estadounidenses y lo demás se le devolverá a Dotcom "inmediatamente", de acuerdo a la decisión judicial.

Por su lado, la Policía neozelandesa mantiene silencio respecto a esta decisión debido a que se encuentra evaluando la sentencia.

Durante la vista, Dotcom lloró cuando su abogado relató cómo el informático alemán fue arrancado de su familia durante el operativo policial en el que se asegura se le confiscó las copias de 135 ordenadores y discos duros.

Su abogado, Paul Davison, comentó que los derechos de su cliente fueron violados cuando se clonaron las copias de sus discos duros para ser llevadas a Estados Unidos, agregó APNZ.
Dotcom, cuya extradición pide EE UU por supuesta piratería informática, fue detenido junto a otros tres directivos de Megaupload en el transcurso de una operación policial internacional que incluyó el cierre de su portal, el embargo de sus bienes y otras detenciones en Europa.

Estados Unidos quiere juzgar a un total de siete ejecutivos de Megaupload, entre ellos los cuatro detenidos en Nueva Zelanda, de diversos delitos de piratería informática, crimen organizado y blanqueo de dinero.
A Megaupload se le atribuye haber causado más de 500 millones de dólares (404 millones de euros) en pérdidas a la industria del cine y de la música al transgredir los derechos de autor de compañías y obtener con ello unos beneficios de 175 millones de dólares (142 millones de euros).