¿Cuál es la mejor terapia de choque para uno de esos días en los que la negatividad domina tu vida? «Comerse un plátano y un puñadito de almendras. Reducen la ansiedad, el estrés y favorecen un estado de ánimo positivo», asegura el experto en nutrición y gastronomía Miguel Ángel Almodóvar, autor del libro «Mood Food. La Cocina de la Felicidad»,
en el que desgrana cómo estos y otros alimentos, entre los que se
encuentran el aceite de oliva, el aguacate, los garbanzos o las
sardinas, pueden ayudarnos a estar de mejor humor y ser más felices.
«No es pseudociencia. Está documentado científicamente que
determinados alimentos, por sus componentes nutricionales, activan los
neurotransmisores cerebrales relacionados con el confort, el placer, la
paz espiritual y el buen ánimo».
Entre esos principios activos que promueven el buen rollo
está por ejemplo el triptófano, la teobromina (solo presente en el
chocolate negro y el guaraná), la fenilanina, la tirosina, las vitaminas
del grupo B, la vitamina C, los hidratos de carbono, los ácidos grasos
omega-3, magnesio, hierro, fósforo, selenio, litio, zinc y capsaicina
(que da el sabor picante a los chiles o guindillas)
Esta relación entre alimentos y emociones no es nueva, ya
en los años ochenta el Instituto Tecnológico de Masachusets (MIT),
recuerda el experto, descubrió que determinados nutrientes afectaban
directamente al proceso de pensar, percibir y sentir. «Llegaron a decir
que un trozo de pastel era mejor medicina para el alma que un fármaco»,
cuenta con sorna. Más recientemente, investigadores de la Universidad
de Michigan concluyeron que tomar una veintena de cerezas al día era más
eficaz que cualquier antidepresivo de síntesis.
Pero ha sido hace menos de una década cuando esta filosofía
se ha puesto de moda. En Japón, Corea y EE.UU ya tiene un buen número
de seguidores. Fue en el país del sol naciente donde en 2005 se lanzó el
primer producto envasado como «mood food», un chocolate enriquecido que
prometía bienestar. En España todavía no han llegado los manufacturados
bajo este sello, pero como, advierte Almodóvar, «lo más sensato» es
utilizar en la cocina los alimentos de temporada que sabemos que
contienen estas propiedades.
Aceite de oliva, aguacate, ajo, plátano, almendras, legumbres, chocolate negro, hígado, marisco, frutos secos, pescado azul, tomate y así hasta 55 alimentos aliados del buen humor están recogidos en este libro, en la que también participan 16 chefs que nos dan ideas originales para prepararlos.
Los alimentos que estresan
Pero igual que existen alimentos que promueven el
bienestar, hay otros que pueden provocar el efecto contrario. Es el caso
del té, el café, las bebidas alcohólicas destiladas,
los refrescos de cola, las carnes rojas o los quesos muy curados, que,
por su riqueza en tiramina, ponen en acción a las catecolaminas, unos neurotransmisores que se asocian con el estrés descontrolado y el nerviosismo.
«El consumo habitual de carne roja provoca
gran irritabilidad, agresividad y puede provocar dificultades
digestivas como el estreñimiento», afirma el autor, quien recuerda que
la OMS recomienda limitar su consumo a dos veces al mes. Almodóvar
recomienda recurrir a otras carnes con poco colesterol y mucho hierro
como el conejo o el hígado de ternera.
«Pero lo que más hierro tiene son los berberechos con limón porque como
mejor se asimila este mineral es en un medio ácido con presencia de
vitamina C», explica.
Las dietas hiperprotéicas también son enemigas del buen humor. «La dieta Dukan es un camino claro a la frustración y el patetismo», asegura Almodóvar, que advierte de que una dieta basada en las proteínas «engaña» al hígado y al riñón «obligándoles a hacer un sobreesfuerzo».
Para terminar, le preguntamos sobre la efectividad de los
alimentos conocidos como «afrodisíacos». «Los que yo consideraría
realmente afrodisíacos son los que hacen que el hígado funcione bien,
como las alcachofas. Si funciona bien tu hígado, lo hace tu mente y ya
sabemos que el órgano sexual central es el cerebro», concluye.
Así sería un día en la dieta de la felicidad
- Desayuno: Plátano, zumo de pomelo, tostada de pan integral con aceite de oliva y diente de ajo.
- A media mañana: Un puñadito de nueces, pipas de girasol y almendra
- Comida: Legumbres (el autor recomienda los garbanzos todos los días), un plato de pollo, pavo o conejo, una ensalada de aguacate y una rodaja de piña de postre.
- Merienda: Una taza de chocolate negro.
- Cena: Pescado azul, como sardinas (Almodóvar recomieda una lata de este pescado en aceite de oliva todos los días) o boquerones.
- Para conciliar el sueño: Unas galletas de cereales integrales y una infusión endulzada con miel.