viernes, febrero 15, 2013

El asteroide DA14 pasa a 27.860 kms y sigue hacia el espacio

La roca, de unos 45 metros y unas 130.000 toneladas es el mayor objeto espacial detectado que se haya acercado a la Tierra.

El asteroide 2012 DA14 ha cruzado este viernes sobre el cielo nocturno de Sumatra (Indonesia) a sólo 27.860 kilómetros de la Tierra, y continuó su travesía cósmica a unos 28.100 kilómetros por hora, según ha informado la agencia espacial estadounidense NASA.

La roca, de unos 45 metros y unas 130.000 toneladas, es el objeto espacial de mayor tamaño que se haya acercado tanto a la Tierra desde que la NASA ha seguido el rastro de los asteroides durante más de medio siglo.

La mayor aproximación ha ocurrido a las 20.24 horas peninsulares, cuando el asteroide ha estado a unos 8.500 kilómetros por debajo de la región donde orbitan unos 400 satélites geoestacionarios.

Los observatorios astronómicos de varias partes del mundo han seguido con sus telescopios la aproximación, paso y alejamiento del asteroide, visible desde zonas de Europa, África, Asia y, principalmente Australia donde a esa hora amanecía el sábado.

 

 

«Bloques de construcción del universo»

 

«Los asteroides y meteoritos contienen materiales muy diferentes a los de la Tierra», ha explicado a Efe Joel Blum, profesor en el Departamento de Ciencias de la Tierra y el Ambiente, en la Universidad de Michigan. «Son los bloques de construcción del universo».

«Mientras que en la Tierra diversos procesos químicos han hecho que algunos componentes se acumulen en el centro del planeta y otros hayan pasado a la superficie, en los asteroides y meteoritos la composición es muy distinta», ha agregado.

Blum ha estudiado los impactos de grandes meteoritos sobre la Tierra, incluido el que ocurrió hace unos 65 millones de años en lo que es ahora la Península de Yucatán (México).

«Dependiendo del tamaño del meteorito, el objeto se desintegra al atravesar la atmósfera terrestre, o se disgrega y deja escombros, o libera tal energía en el impacto que dispersa materiales y gases a gran distancia», ha añadido.

Muchos científicos atribuyen la extinción de los dinosaurios a las consecuencias del impacto del meteorito en Yucatán.

El 2012 DA14 es extremadamente opaco y, desde que en febrero de 2012 lo detectaron astrónomos aficionados en La Sagra (Mallorca, España) la vigilancia de su trayectoria se ha hecho principalmente con observaciones en la gama infrarroja donde se detecta el reflejo de la luz del Sol sobre la superficie del asteroide.

En los momentos de más resplandor en su paso por el vecindario de la Tierra, el asteroide brilló con una magnitud +7,4, y sobre el telón de fondo del cielo oscuro y estrellado pasó moviéndose a 0,8 grados por minuto.

 

 

Los puntos de visión


Después el asteroide pasó, en el campo visual desde la Tierra, entre la «Cruz del Sur» y el conjunto de astros conocido como «Cruz Falsa», seguirá hacia el norte terrestre por el medio de la constelación de la Hidra, a través de la constelación del Cráter y se irá muy cerca de la estrella Denebola, en la punta de la cola de Leo, poco antes de las 21.00 horas peninsulares.

Para cuando llegue la noche en América, el 2012 DA14 estará alejándose y sólo con telescopios quizá sea visible entre las horas 24.00 y 03.00 GMT, ha explicado la NASA.

Este viernes, sin vinculación alguna con el 2012 DA14, un meteorito cayó en los montes Urales, en Rusia, y causó heridas a un millar de personas.

El ingeniero Rainer Krefken, de la Agencia Espacial Europea, dijo a Efe que «si el meteorito hubiera tenido que ver con el asteroide, hubiera presentado otra dirección de vuelo, hubiera volado de Sur a Norte y no de Este a Oeste, como ha sido el caso».

La caída de meteoritos es un fenómeno que ocurre una vez al año, pero normalmente pasa inadvertido porque suele ocurrir en zonas poco pobladas.

El suceso registrado hoy en la región rusa de Cheliábinsk, en los montes Urales, es el accidente de mayores consecuencias originado por un cuerpo celeste en la Tierra en los últimos años.
También fue un meteorito el responsable de una gigantesca explosión que en la mañana del 30 de junio de 1908 devastó una superficie de 2.200 kilómetros y arrasó más de 80.000 árboles cerca del río Tunguska, en la taiga siberiana (Rusia).