jueves, febrero 13, 2014

La UE fija estándares para el desarrollo de coches conectados

La Comisión Europea ha anunciado que se han concluido los trabajos para definir estándares comunes para el desarrollo de coches «conectados» en las carreteras europeas, lo que permitirá que vehículos de distintos fabricantes puedan comunicarse entre sí y también con las infraestructuras viales de aquí a 2015.

«La comunicación entre coches e infraestructuras garnatizará flujos de tráfico más seguros y eficaces, algo que beneficiará tanto a conductores y peatones como al medio ambiente y a la economía europea», ha destacado la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario y responsable de Telecomunicaciones, Neelie Kroes.

El Instituto Europeo de Normas en Telecomunicaciones (ETSI) y el Comité Europeo de Normalización (CEN) han sido los responsables de establecer las nuevas normas en este sentido, una tarea para la que la Unión Europea lleva invertidos más de 180 millones de euros en distintos proyectos de investigación sobre sistemas de transporte cooperativo.

Bruselas confía en que estas reglas coloquen a la industria europea a la cabeza de la próxima generación de automóviles.


Crean un chip que 'escucha' las bacterias


Investigadores de la Universidad de Columbia (EE.UU.) han desarrollado un nuevo tipo de chip que permite 'escuchar' a las bacterias.

Para crearlo, los científicos y los ingenieros usaron el semiconductor complementario de óxido metálico (CMOS, por sus siglas en inglés), es decir, la misma tecnología que se usa para las memorias o microprocesadores de los dispositivos electrónicos.

¿Qué interés nos presentan los 'pensamientos' de las bacterias? El objetivo fue comprender cómo se forman las 'biopelículas': comunidades microbianas que crecen en superficies tanto vivas como inertes y tienen características funcionales y estructuras complejas. Saber cómo se forman estos sistemas es importante porque un 70% de las infecciones microbianas son provocadas por estas bacterias. "Destruir la formación de biopelículas tiene implicaciones importantes para la salud pública, ya que permitiría reducir las tasas de infección", comenta el director de la investigación, Ken Shepard, profesor de ingeniería eléctrica y biomédica.

"Es un gran paso adelante", dice Lars Dietrich, profesor asistente de ciencias biológicas en la Universidad de Columbia. "Usamos este chip para 'escuchar' las conversaciones que tienen lugar en las biopelículas, pero también estamos intentando a usarlo para interrumpir estas conversaciones y así paralizar las biopelículas".