El nuevo laboratorio Theranos dice que su método para analizar la sangre es más rápido, más preciso y mucho menos doloroso. Permite obtener los resultados de una amplia gama de pruebas en un par de horas con solo una gota de sangre del paciente.
Una gota de sangre puede revelar muchas cosas: desde identificar las enfermedades del corazón, enfermedades de transmisión sexual o diabetes hasta signos de algunos tipos de cáncer. Sin embargo, un análisis de sangre no es un proceso sencillo y sus resultados tardan más de un día y en ocasiones más de una semana. Elizabeth Holmes, química y empresaria estadounidense, cree que el retraso de una semana es inaceptable, ya que podría significar un grave riesgo para los pacientes cuya condición requiera una intervención médica inmediata, por lo que ha desarrollado una nueva tecnología para analizar la sangre, informa 'The Wall Street Journal'.
En el marco de la tecnología Theranos –que Holmes comenzó a desarrollar hace una década– en vez de numerosos procedimientos de donación de sangre solo se requiere una gota de sangre del tamaño de una gota de lluvia. Esto basta para obtener los resultados de 30 análisis que estarán disponibles el mismo día.
Por lo general, las muestras de sangre al principio se llevan al laboratorio, donde se mezclan con ciertos productos químicos o pasan a través de un equipo especial. De acuerdo con la organización sin fines de lucro ECRI Institute, especializada en temas de salud, este camino hacia el laboratorio se relaciona con el 70% de los errores en el análisis.
Los problemas surgen si la temperatura de las muestras no se mantiene correctamente, así como en el proceso de fraccionamiento manual, cuando se separa el plasma y los glóbulos rojos y blancos. Además, los laboratorios utilizan equipos de diferentes proveedores que, a menudo, no están correctamente calibrados.
Sin embargo, la compañía de Holmes no lleva las muestras a un laboratorio ajeno, sino que las recoge en uno de sus dos laboratorios especializados, donde se efectúa todo el proceso desde el principio hasta el final. Según Holmes, esto reduce los costos y elimina los errores.
Otro aspecto destacado, de acuerdo con Holmes, es que su empresa evita a los pacientes la extracción de sangre innecesaria. Hay casos en que el hospital tomó un volumen de sangre 45 veces mayor del necesario, solo para asegurarse que las muestras no se estropeen. Además, el nuevo método ayuda a tomar las pruebas de niños pequeños sin dejar cicatrices en la piel, así como atender con más eficacia a las personas mayores, los pacientes con cáncer y otros cuyas venas son difíciles de encontrar.
En el marco de la tecnología Theranos –que Holmes comenzó a desarrollar hace una década– en vez de numerosos procedimientos de donación de sangre solo se requiere una gota de sangre del tamaño de una gota de lluvia. Esto basta para obtener los resultados de 30 análisis que estarán disponibles el mismo día.
Por lo general, las muestras de sangre al principio se llevan al laboratorio, donde se mezclan con ciertos productos químicos o pasan a través de un equipo especial. De acuerdo con la organización sin fines de lucro ECRI Institute, especializada en temas de salud, este camino hacia el laboratorio se relaciona con el 70% de los errores en el análisis.
Los problemas surgen si la temperatura de las muestras no se mantiene correctamente, así como en el proceso de fraccionamiento manual, cuando se separa el plasma y los glóbulos rojos y blancos. Además, los laboratorios utilizan equipos de diferentes proveedores que, a menudo, no están correctamente calibrados.
Sin embargo, la compañía de Holmes no lleva las muestras a un laboratorio ajeno, sino que las recoge en uno de sus dos laboratorios especializados, donde se efectúa todo el proceso desde el principio hasta el final. Según Holmes, esto reduce los costos y elimina los errores.
Otro aspecto destacado, de acuerdo con Holmes, es que su empresa evita a los pacientes la extracción de sangre innecesaria. Hay casos en que el hospital tomó un volumen de sangre 45 veces mayor del necesario, solo para asegurarse que las muestras no se estropeen. Además, el nuevo método ayuda a tomar las pruebas de niños pequeños sin dejar cicatrices en la piel, así como atender con más eficacia a las personas mayores, los pacientes con cáncer y otros cuyas venas son difíciles de encontrar.