Quienes no se fíen de la promesa de Facebook de mantener Instagram sin modificaciones tras su adquisición siempre puede 'borrarse' de la aplicación de imágenes y mudarse a otra similar. ¿Cómo? Muy sencillo: exportando todas las fotos de Instagram para guardarlas en otra ubicación y después importarlas a un sistema distinto.
Hay varios servicios que lo permiten, como Copygram o InstaBackup, pero el más popular quizás sea Instaport -recomendado por Instagram, durante las últimas horas ha tenido problemas de funcionamiento por el alto volumen de tráfico-, que permite recopilar todas las imágenes en un archivo comprimido y guardarlas en el ordenador. Su funcionamiento es muy sencillo:
En primer lugar, hay que acceder a la página con la cuenta de Instagram:
A continuación, confirmar el acceso a la aplicación:
Por último, seleccionar qué fotos se desea exportar, para lo que hay diferentes opciones (todas, las últimas, las hechas entre determinadas fechas, las que te han gustado o las etiquetadas un determinado 'hashtag'):
Una vez completados estos sencillos pasos basta con esperar a que las imágenes se procesen y acaben, bien seguras, en nuestro disco duro.