El ibuprofeno, el paracetamol o la aspirina pueden aumentar el malestar si son tomados en exceso. Es fácil superar el límite: se pueden tomar hasta 10 ó 15 comprimidos por mes. La clave, no automedicarse.
Un dicho popular sugiere que el remedio es peor que la enfermedad.
Ahora, expertos europeos y locales confirman algo parecido: abusar del
remedio puede generar el efecto contrario al deseado. Eso sucede con los
analgésicos que solemos tomar cuando nos duele la cabeza: ibuprofeno,
paracetamol y aspirina. Y es fácil excederse.
“El sobreuso es
común, con pocos analgésicos ya se llega. Hay exceso cuando se toman,
en un mes, 15 comprimidos de los analgésicos comunes o 10 de los
combinados”, comenta a Entremujeres la
doctora Mónica Diez, neuróloga y presidenta de la Asociación
Argentina de Cefaleas. La especialista recomienda, entonces, tomar menos
que esas cantidades.
Los analgésicos comunes son el
paracetamol, la aspirina y los antiinflamatorios no esteroideos, como el
ibuprofeno. El segundo grupo son los creados en base a una combinación
de analgésicos.
En Gran Bretaña, los Institutos Nacionales de
Salud (NICE) acaban de difundir un comunicado donde alertan sobre los
riesgos del abuso de estos medicamentos. Y elaboraron unas guías para
informar a la población que tomarlos la mitad de los días del mes
empeora el dolor de cabeza.
“El tema está determinado desde hace
muchos años: se la denomina cefalea secundaria y se da por el sobreuso
de los analgésicos. Es importante informar a la población acerca del
riesgo de la sobremedicación”, agrega Diez. En caso de sobreuso sugiere
hacer una desintoxicación. Y, para los casos de dolores de cabeza
frecuentes, comenta que existe otro tipo de medicación que es
preventiva y que no son analgésicos.
Para evitar excesos, la clave
está en no automedicarse y consultar a un médico cuando aparece alguna
de estas situaciones de alerta:
* Dolores graves que se acompañan de otros síntomas.
* La ingesta de muchos analgésicos.
* Dolores que nos incapacitan para hacer otras actividades.
* Dolores que aparecen después de un traumatismo.
* Las personas mayores de 50 años deben potenciar los cuidados.
“ El
dolor de cabeza está muy subestimado en la población. El paciento al
principio no consulta o lo hace solo ante las crisis agudas. Poca gente
hace tratamientos preventivos”, concluye la experta.